Los partidos ni siquiera se ponen de acuerdo en cómo recortar sus gastos

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Sergio Barrenechea | Efe

PP y PSOE rechazan el techo máximo que quieren imponer Podemos y Ciudadanos

06 may 2016 . Actualizado a las 08:49 h.

Era lo único en lo que todos los partidos parecían estar de acuerdo, pero ni siquiera en el recorte de los gastos de una campaña electoral que se celebrará solo seis meses después de la anterior fue posible el consenso. La primera reunión convocada con el objetivo de pactar una reducción de costes concluyó en fracaso por el desacuerdo total en dos cuestiones capitales: la aplicación de un techo de gasto total a los partidos y las posibles modificaciones en el sistema de buzoneo con el que las fuerzas políticas hacen llegar por correo a cada votante su propaganda y sus propias papeletas para el Congreso y el Senado, en este último caso con la casilla de sus candidatos ya marcada.

Todos están de acuerdo en recortar gastos, pero no en cómo hacerlo. En lo único en lo que, por ahora, se atisba un posible consenso, es en la posible eliminación de la publicidad en vallas y carteles. Algo que supone solo un 20 % del gasto total de los partidos, que es en realidad un gasto del Estado, ya que lo invertido durante la campaña se les devuelve luego en función de los escaños obtenidos. Pero ni siquiera aquí hay unanimidad, ya que Compromís, IU y PNV quieren mantener la publicidad exterior alegando que los partidos minoritarios no tienen «una presencia continuada» en los medios de comunicación y quitar la cartelería les restaría visibilidad de cara a la ciudadanía.

La discrepancia fundamental radica en que el PSOE y el PP están de acuerdo en que todos los partidos reduzcan su gasto un 30 % respecto a lo que invirtieron en la pasada campaña, mientras que Podemos y Ciudadanos pretenden introducir un techo máximo de gasto único para todos los partidos, lo que igualaría lo que cada fuerza puede invertir en la campaña, al margen del número de escaños que obtenga.

Podemos quiere situar ese tope en los tres millones de euros, una cifra muy cercana a los 2,2 millones de euros que el partido morado gastó en la anterior campaña, por lo que el cambio apenas le afectaría. Ciudadanos, que gastó 4 millones de euros en el 2015, propone un techo de 6,5 millones de euros para cada formación, en lugar del tope de 13 millones actual. PP y PSOE serían los grandes perjudicados con cualquiera de esas dos propuestas, ya que verían igualada su capacidad de gasto a la de formaciones con menor número de escaños.

 

Gastos que sufraga el Estado

El otro foco de discordia es el llamado mailing, un elemento clave de la campaña, ya que es el único contacto directo de los partidos con todos y cada uno de los votantes. De nuevo aquí el PSOE y el PP van de la mano al pretender que se mantenga el sistema actual de envío de cartas individualizadas a cada ciudadano, mientras que Podemos y Ciudadanos proponen que se haga un único envío a cada elector que contenga propaganda y papeletas de todos los partidos, lo que abarataría notablemente el gasto. El PP rechaza de plano esta posibilidad, que considera incluso «ilegal», mientras que el PSOE se muestra dispuesto al menos a valorar esa vía. Para socialistas y populares, estos envíos son de gran importancia, ya que tienen una mayor implantación en el mundo rural, donde los votantes están acostumbrados a recibir las papeletas con sus candidatos ya marcados.

El gasto en buzoneo de los partidos, que también corre en su mayoría a cargo del Estado, dado que todas las fuerzas que obtienen un grupo propio en el Congreso recuperan casi todo lo invertido en ese capítulo, supuso un desembolso de dinero público de 50 millones de euros en las pasadas elecciones generales.

Susana Díaz dice que el «sorpasso» de Podemos al PSOE es «una broma»

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, aseguró ayer que el sorpasso de una coalición entre Podemos e IU al PSOE le «suena a broma» y que el único sorpasso que a ella le preocupa es el que tiene que dar su partido «ganando bien las elecciones el 26 de junio». Aseguró que de ese tema se habla en España desde hace muchos años y «siempre se ha traducido en que los que pretendían el adelantamiento han llevado a una representación irrisoria a su fuerza política, véase Julio Anguita». «Lo del sorpasso me suena a broma», añadió la líder del PSOE en Andalucía.

Rajoy dice que él va a hablar de «lo que le importa a los españoles» y no de «zascandiladas»

«Voy a hablar de lo que le importa a los españoles. No voy a entrar en dimes y diretes ni en zascandiladas políticas». El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, anunció así ayer su intención de repetir el mismo esquema de campaña que protagonizó en las pasadas elecciones generales, centrado en materia económica y, muy especialmente, en el empleo, y evitando en lo posible entrar en la refriega de acusaciones cruzadas con el resto de candidatos. «Yo voy a hacer mi campaña, y eso de salir al paso de lo que otros dicen se acabó», señaló Rajoy, quien en conversación con la prensa se mostró convencido de que el PP mejorará en las próximas elecciones los resultados obtenidos el 20D, aunque eludió precisar en qué medida. Tampoco quiso adelantar nada sobre los posibles pactos entre el PP y Ciudadanos, ni sobre la insistencia del líder de Ciudadanos, Albert Rivera, de que está dispuesto a llegar a acuerdos con los populares, pero siempre que Rajoy dé un paso atrás.

 

Nuevo Ejecutivo en agosto

Las previsiones del presidente del Gobierno en funciones son que para primeros de agosto haya ya un nuevo Ejecutivo porque, si no, se estaría ante una situación «preocupante». Durante su visita a la sede en Guadalajara de la multinacional alemana Witzenmann, el líder del PP lanzó un mensaje de optimismo de cara al futuro de España. Consideró que en ese horizonte la creación de empleo es «la gran necesidad nacional» y en ello se deben volcar las diferentes administraciones, facilitando que los proyectos de los emprendedores se lleven a cabo.