El expresidente catalán ya fue condenado a año y medio de inhabilitación por desobediencia
04 ene 2021 . Actualizado a las 23:33 h.Quim Torra será juzgado por segunda vez como presunto autor de un delito de desobediencia. El expresidente de la Generalitat, ya condenado a un año y medio de inhabilitación, ha sido procesado este lunes por la misma razón por la que ya fue cesado anteriormente, esto es, por no retirar a tiempo una pancarta a favor de los presos del balcón del Palau de la Generalitat.
En el primer caso, por el que ya fue condenado, se negó a descolgar la pancarta cuando así se lo requirió la Junta Electoral Central durante el período previo a los comicios generales de abril del 2019. Su negativa le llevó a recibir una querella y una denuncia de Ciudadanos, que desembocarían en una condena ya firme por el Tribunal Supremo. Pero durante el periodo electoral de las elecciones generales de noviembre, Torra volvió a negarse a descolgar una segunda pancarta, en esta ocasión en contra del requerimiento del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) y quien le denunció entonces fue la entidad Impulso Ciudadano. Luego fue investigado por un nuevo delito de desobediencia, compareció ante el juez y ahora resulta procesado, por lo que está cerca de confirmarse que en unos meses volverá a sentarse en el banquillo de los acusados. En ambos casos, el expresidente alegó que defendió la libertad de expresión.
La jueza del TSJC María Antonia Coscollola, no obstante, es contundente y anticipa ya una posible segunda condena a la vista de la similitud de conductas. «El president de la Generalitat fue notificado y requerido personalmente para retirar la pancarta por parte de la sala de lo contencioso administrativo del TSJC, y a pesar de ello no lo hizo», señala en el auto en que da a las partes diez días para que presenten sus escritos de acusación y defensa, donde soliciten la apertura de juicio oral o bien el sobreseimiento del caso. «Hubo presuntamente por parte del investigado una falta de acatamiento», señala la magistrada. «Sin que ello implique hacer valoraciones anticipadas, la conducta del investigado demuestra indiciariamente una contumaz rebeldía frente a lo ordenado», concluye.
Recuerda asimismo esta magistrada como en un comunicado de la propia oficina del presidente de la Generalitat, el acusado, «ya notificado y requerido personalmente de cumplimiento, manifestó expresamente que no retiraría la pancarta». Torra la quitaría finalmente ocho días después del auto dictado por el TSJC, en el que se le daban 48 horas para proceder a descolgar el cartel que rezaba «libertad de los presos políticos y exiliados», en catalán y en inglés, con un lazo amarillo. Solo accedió a ello cuando el tribunal instó directamente a los Mossos a actuar. El líder independentista quiso evitar así la imagen de la Policía catalana entrando al Palau de la Generalitat para retirar la pancarta.
«Contumaz rebeldía»
El segundo juicio contra Torra llegará cuando ya no es presidente de la Generalitat. Cesó del cargo el pasado septiembre, tras la confirmación de la condena del TSJC por parte del Tribunal Supremo. Después JxCat y ERC renunciaron a investir a otro presidente y Pere Aragonès asumió la jefatura del Gobierno autonómico de forma interina hasta las elecciones del próximo 14 de febrero. Pese a todo, y una vez notificado el auto, el expresidente catalán se ha reafirmado en que volvería a hacerlo, como ha dicho en varias ocasiones. «Contumaz rebeldía. Si eso quiere decir volver una y otra vez a plantarse contra el Estado español en defensa de los derechos fundamentales, la acusación es correcta», escribió en Twitter.