Jordi Cuixart deja la presidencia de Òmnium Cultural

Cristian Reino BARCELONA / COLPISA

ESPAÑA

Jordi Cuixart, presidente de Òmnium Cultural
Jordi Cuixart, presidente de Òmnium Cultural Pau Venteo - Europa Press

«Hacen falta nuevos liderazgos» en el independentismo, ha afirmado, en pleno debate sobre si Puigdemont debe o no cesar como presidente de Junts

14 ene 2022 . Actualizado a las 11:59 h.

Decisión de calado en el independentismo catalán, que puede dar paso a un cambio de generación. El presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha anunciado este viernes que abandona la dirección de la entidad nacionalista y se aparta de la primera línea del secesionismo. Le sustituirá el filósofo Xavier Antich en la próxima asamblea de la entidad, creada en pleno franquismo por la burguesía catalana para defender el catalán, del 26 de febrero.

Cuixart fue condenado a nueve años de prisión por un delito de sedición como uno de los líderes del desafío independentista de octubre del 2017. En el mes de junio del año pasado, fue indultado por el Gobierno. Su abrazo con el ministro Miquel Iceta, en el Palau de la Generalitat, levantó ampollas en el mundo soberanista. Llevaba seis años como máximo dirigente de Òmnium, plataforma que junto a la ANC, es responsable de la movilización ciudadana del procés. En una entrevista en Rac-1, Cuixart ha afirmado este viernes que cesa como presidente de la entidad porque se ha acabado su mandato de seis años. Continuará como activista, pero sin entrar en política institucional. Cuixart, que es propietario de una empresa, ha lanzado un mensaje de una enorme carga en el mundo independentismo: «Hacen falta nuevos liderazgos» en el movimiento nacionalista, ha expresado.

«No podemos renunciar a Puigdemont, Junqueras y Gabriel, pero es obvio que en la situación real, en la que hace una estrategia compartida, hacen falta nuevos liderazgos que propicien que se pueda llevar a cabo una estrategia compartida», ha asegurado. El dirigente secesionista, con su paso al lado, está invitando a que hagan lo mismo tanto Carles Puigdemont como Oriol Junqueras, enfrentados desde octubre del 2017 y que ya han demostrado que su enemistad es irreconciliable. Cuixart, hablando de nuevos liderazgos y de la necesidad de que los partidos sean capaces de consensuar una estrategia común, está señalando directamente a los líderes de Junts y ERC y les hace responsables de que el independentismo esté inmerso en una guerra civil continua. «Hay que predicar con el ejemplo», ha presionado. Cuixart es el primero de los primeros espadas del órdago de 2017 que abandona su cargo. Puigdemont mantiene la confrontación desde Waterloo, Junqueras preside ERC y Jordi Sànchez es el secretario general de Junts.

Puigdemont, de hecho, tiene un mes para decidir si cesa como presidente de Junts. Hay voces del Consejo para la República, la entidad privada y paralela creada por el expresidente desde Waterloo para seguir dirigiendo el independentismo, que le piden que si quiere continuar presidiendo el llamado gobierno catalán en el exilio tiene que dejar la presidencia de Junts. Se especula además con el posible regreso del líder nacionalista, si la Justicia europea le reconoce la inmunidad como europarlamentario y deja sin efecto las euroórdenes cursadas por el Tribunal Supremo para ser juzgado en España. En ERC, por su parte, están llevando una transición más tranquila, pilotada por el liderazgo cada vez mayor de Pere Aragonès, como presidente de la Generalitat.