La negligencia de un agricultor provocó el fuego que casi quema la abadía burgalesa de Silos
ESPAÑA
![Un bombero observa las llamas del incendio declarado este domingo en Quintanilla del Coco, en Burgos, que obligó a evacuar el monasterio de Santo Domingo de Silos](https://img.lavdg.com/sc/lEivAAFoBVTLLQOfyvCdthmV8F8=/480x/2022/07/26/00121658856362188734752/Foto/GL27P17F1_192348.jpg)
La chispa de un segunda cosechadora causó un incendio forestal idéntico en Guadalajara y cuatro pirómanos han sido detenidos en una semana
26 jul 2022 . Actualizado a las 19:56 h.La irresponsabilidad de un agricultor burgalés puso el domingo pasado en riesgo muchas vidas y propiedades y, al mismo al tiempo, estuvo muy cerca de causar graves daños o incluso liquidar una de las principales joyas del románico europeo, la abadía de Santo Domingo de Silos.
La Guardia Civil arrestó y puso a disposición judicial a un agricultor de la población de Quintanilla del Coco como presunto autor de un delito contra el medio ambiente, en su caso concreto por una negligencia grave que desató un incendio forestal en la comarca del Arlanza que, pese a los esfuerzos de los bomberos, en pocas horas arrasó entre 3.000 y 3.500 hectáreas, una superficie del tamaño de Santander.
El detenido, de 47 años, está acusado de ignorar la prohibición de la Junta de Castilla y León que, dado el alto riesgo de incendio forestal, tiene prohibido el uso de maquinaria agrícola en las horas centrales del día, de 12.00 a 19.00 horas. El Gobierno autonómico justifica esta prohibición por ser la comunidad más castigada por el fuego este verano, con más de 80.000 hectáreas calcinadas en poco más de un mes. Según la investigación realizada por miembros del Seprona, el detenido habría utilizado una cosechadora en un campo de cereales que habría generado la chispa que desató el incendio forestal, según corroboran las declaraciones de testigos, la inspección ocular y las pruebas periciales practicadas en el lugar en el que hace unas horas permanecía la máquina agrícola rodeada de cenizas. El investigado quedó hoy en libertad provisional tras pasar a disposición el juez instructor de Lerma. El fiscal no pidió medidas cautelares.
Evacuados monjes y vecinos
El fuego, que se extendió a gran velocidad por campos de cereal, arbolado y montes, obligó a evacuar de urgencia a casi 1.000 vecinos de cinco pueblos de la zona, campistas, veraneantes y a los aproximadamente treinta monjes benedictinos que viven en la abadía de Silos. El fuego quemó más de 40 casas en Santibáñez del Val y algunas construcciones y almacenes agrícolas y ganaderos del pueblo de Silos, quedándose las últimas llamas a un tiro de piedra del monasterio que alberga un claustro románico de los siglos XI y XII con unos capitales de una belleza y originalidad únicas en su género.
Se trata de una negligencia prácticamente idéntica a la ocurrida un día después, el lunes, en una pedanía de la población guadalajareña de Humanes, que creó otro incendio forestal de más de 2.000 hectáreas, aún activo, que ha obligado a desalojar a los vecinos de dos pueblos. Aunque no consta que haya habido detenciones, el fuego se originó también en un campo en el que se cosechaba en horario desaconsejado por el riesgo de incendios.
Guardia Civil y Mossos d'Esquadra, con la colaboración de policías locales, se han esmerado desde el inicio de las olas de calor que han convertido este verano en el año con mayor superficie calcinada por el fuego en lo que va de siglo en la persecución de incendiarios. De hecho, en la última semana han detenido, además de al agricultor burgalés, al menos a cuatro presuntos pirómanos. A dos de ellos en la provincia de Valencia, uno en Tarragona y al cuarto en Madrid.
En paralelo a los arrestos, los incendios forestales siguen quemando el país. En Huelva, en Almonte, un fuego que parece que no alcanzará Doñana, mantiene evacuados de sus casas a decenas de vecinos; en Malagón, Ciudad Real, las llamas han calcinado ya 2.800 hectáreas; y sigue activo en Humanes el incendio con un millar de desalojados.