El PP modificará el reglamento del Senado para retrasar la ley de amnistía

Carlos Peralta
C. Peralta REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

Alberto Núñez Feijoo y José María Aznar, ayer en la Universidad Francisco de Vitoria.
Alberto Núñez Feijoo y José María Aznar, ayer en la Universidad Francisco de Vitoria. Borja Sánchez-Trillo | EFE

Buscan eludir la tramitación de urgencia para alargar el plazo a los dos meses

03 nov 2023 . Actualizado a las 20:59 h.

El Partido Popular busca entorpecer la aprobación de una eventual ley de amnistía. «No desvelo nada si digo que evidentemente el Grupo Parlamentario Popular no va a facilitar la tramitación», afirmó ayer a Antena 3 el presidente del Senado y vicesecretario del PP, Pedro Rollán. La formación popular cuenta con una mayoría en la Cámara Alta, con 144 de los 266 escaños totales.

El partido liderado por Alberto Núñez Feijoo propuso ayer una reforma del Reglamento del Senado, basada en añadir un nuevo apartado al artículo 133, con el que pretende que la Mesa tenga la potestad de rechazar la tramitación de urgencia de una proposición de ley, el formato legislativo donde entraría una eventual medida de gracia. En el nuevo apartado se aclararía que «en las proposiciones de ley, la Mesa del Senado podrá decidir la aplicación del procedimiento de urgencia cuando así lo solicite el Gobierno o el Congreso de los Diputados, o también actuando de oficio o a propuesta de un grupo parlamentario o de veinticinco senadores».

Convocatoria extraordinaria

Eliminar las condiciones de una tramitación de urgencia en la Cámara Alta podría retrasar la aprobación de una eventual ley de amnistía, en caso de que la tramitación se lleve a cabo en los próximos días, ya que el Senado podría dilatar entonces su previsible veto a la totalidad hasta los dos meses, según el límite que marca el artículo 90 de la Constitución. Otro artículo de la carta magna, el 73, define enero como un mes inhábil salvo por «sesiones extraordinarias» a petición del Gobierno, de la mayoría de las dos Cámaras o de la Diputación Permanente, el órgano que actúa durante los meses de inactividad. En un contexto con Pedro Sánchez reelegido, el Ejecutivo podría instar al Senado a convocar una sesión plenaria para acelerar el proceso de tramitación.

El Partido Popular argumenta, en su iniciativa de cambiar el Reglamento, que el tercer punto del artículo 90 de la carta magna dice que el Senado cuenta con un plazo máximo de dos meses para validar o vetar «un proyecto» y que, por tanto, nada dice la Constitución sobre proposiciones de ley como una hipotética medida de gracia. Habitualmente, y más dada la mayoría del PP, esta modificación del Reglamento podría ejecutarse antes de fin de mes, según asesores jurídicos de la Cámara Alta.

La rotunda oposición del Senado a la aprobación de una eventual ley de amnistía no impediría su validación, ya que en última instancia su tramitación volvería al tejado del Congreso de los Diputados, donde podría aprobarse en una primera votación con mayoría absoluta que, de no salir adelante, tendría una segunda ronda en la que sería suficiente una mayoría simple de los diputados.