Felipe González carga en «El Hormiguero» contra el PSOE, Zapatero y la carta a la ciudadanía de Pedro Sánchez: «Yo no me la creí»
ESPAÑA
El expresidente del Gobierno ha cuestionado en el programa de Pablo Motos el liderazgo del jefe del Ejecutivo, el conflicto con Milei e incluso la campaña socialista en las últimas elecciones gallegas. El ministro Albares ha lamentado su «tono hiriente»
24 may 2024 . Actualizado a las 17:57 h.El expresidente del Gobierno Felipe González ha cuestionado el liderazgo del jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, tras su carta de reflexión, a la vez que ha tachado de «oportunista» la retirada de la embajadora española en Argentina en respuesta a las declaraciones del mandatario Javier Milei sobre la esposa del presidente, Begoña Gómez.
«Yo eso no lo hubiera hecho», ha sentenciado González, en referencia a la retirada de la embajadora María Jesús Alonso, si bien ha tachado de «maleducada» e «insultante» la actitud de Javier Milei. «Yo hubiera preferido la respuesta del papa Francisco», ha recalcado, en relación a las palabras del pontífice que llamó «representante del maligno en la Tierra» al mandatario argentino.
Dicho esto, González ha recordado que hay decenas de miles de españoles en Argentina y que en España hay centenares de miles de argentinos. «La diplomacia tiene que servir a nuestros conciudadanos y también a nuestras empresas estén donde estén y aquí tenemos que atender a los argentinos que están», ha añadido en una entrevista este jueves en el programa 'El Hormiguero', recogida por Europa Press.
«¿Se puede permitir un conflicto de Estado con Argentina? Sí, se lo puede permitir. Nosotros lo podemos permitir todo. ¿Cuánto le cuesta a los españoles? Eso ya hay que calcular si nos lo podemos permitir o no. Pero por permitir, puedes permitir todo», ha sentenciado.
En el plano nacional, y preguntado sobre si Sánchez debería dar explicaciones por la apertura de diligencias contra su esposa, Felipe González ha asegurado que es «responsabilidad» del líder del Ejecutivo «dar explicaciones» sobre todo «lo que hace él», al tiempo que ha pedido a la política que no se meta en «los problemas familiares»: «Que le pidan todas las responsabilidades que quieran a Pedro Sánchez, no solo tiene derecho, tiene la obligación de hacerlo», ha insistido, para opinar después que en política sí que hay «líneas rojas», que son «la decencia» porque cuando esta se pierde «no hay línea roja».
Previamente, el expresidente ha cuestionado la carta de Sánchez -«Yo no me la creí», ha expresado textualmente- en la que abrió un periodo de reflexión para determinar su continuidad en el Gobierno. «Eso no es liderazgo», ha dicho, para después añadir que «la persona que tiene la responsabilidad de tomar decisiones duda con la almohada», pero no pregunta a los ciudadanos «qué hay que hacer». «Cuando se está en el Gobierno para gobernar, se está para estar», ha enfatizado.
Al hilo, ha recordado que en su etapa al frente del PSOE nunca tuvo una votación «unánime en ningún órgano de representación del partido», lamentando que con Sánchez no se pueda discrepar dentro del partido. Incluso ha citado que no se respetó en Aragón la votación de la militancia a una candidata al Parlamento europeo. «La persona que ha salido en la lista no tiene el apoyo de la gente», ha subrayado.
González ha ironizado ahora que el PSOE sea el partido de los militantes «por primera vez» pero, sin embargo, han «castigado» al senador y secretario general del PSOE de Aragón, Javier Lambán, «porque hace lo que decía el partido el 23 de julio» con la ley de amnistía. «No podemos insultar la inteligencia. Dicen que la política del perdón ha funcionado. Será que nos ha perdonado Puigdemont (...) No ha habido más que el arrodillamiento del Estado frente a un señor que se fugó de la justicia», ha zanjado.
Conflictos
Al hilo, Felipe González se ha preguntado por qué España «no ha roto» con Rusia, tras la invasión de Ucrania, alegando al mismo tiempo que «hay muchísimos más muertos» por la «criminalidad» del presidente ruso, Vladimir Putin, que «el horror» que se vive en Gaza, tras un atentado terrorista «terrible» perpetrado por Hamás.
Un conflicto que, según ha manifestado, le preocupa a la vez que le «asustan» las reacciones de los dirigentes políticos en España, entre los que ha destacado a la líder de Sumar, Yolanda Díaz, «que resta más que suma», ha ironizado, por decir que «reconocer el Estado palestino está bien» pero que «no es suficiente, que es desde el Jordán hasta el mar».
«¿Quién le habrá contado eso? Desde el Jordán hasta el mar, es toda Palestina. Eliminando a Israel. Por tanto, quiere decir que hay que echar, como dicen los iraníes, a los judíos al mar, como los echó Hitler, que los echó a las cámaras de gas. Que me aclaren cómo se arregla un conflicto así», ha reflexionado.
Cataluña
En otro orden de cosas, el expresidente ha sostenido que el primer secretario del PSC, Salvador Illa, ha disminuido el «procesismo» en Cataluña tras su victoria en las elecciones catalanas del 12 de mayo, asegurando al mismo tiempo que lo ha trasladado al conjunto de España.
Con la Constitución en la mano, el expresidente socialista ha recordado que en Cataluña se votó la Carta Magna y ha espetado al expresidente de la Generalitat y líder de Junts, Carles Puigdemont, y al líder de ERC y presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès, que tendrían que tener respeto para esos catalanes que la votaron entonces. «No es un arma de agresión, sino de concordia, de convivencia, de pacto para que todos podamos vivir con libertad, para que nadie nos señale», ha resaltado González.
No obstante, a pesar de las críticas lanzadas sobre la actual deriva del PSOE en relación a sus pactos con los partidos independentistas catalanes, el expresidente ha mostrado su apoyo para que Illa sea el próximo presidente de la Generalitat y no suceda un «intercambio de cromos» en relación al apoyo de Puigdemont para investir a Pedro Sánchez presidente del Gobierno pese a haber perdido las elecciones generales.
«Puigdemont dice: 'es que tú también perdiste y con mi apoyo gobernaste, por tanto, ahora devuélveme el apoyo para que no sea Illa el que gobierne», ha dicho González, esperando que esta opción «no ocurra».
«Al contrario, yo creo que hay que apoyar, de verdad hay que apoyar a Salvador, por los catalanes, por la sociedad catalana, porque además tiene el estilo de convivencia que se merecen los ciudadanos. Dialoga con todo el mundo y se preocupa de los problemas reales de la gente, no de la fantasía», ha añadido.
En este sentido, González ha insistido en que se le dé apoyo al primer secretario del PSC por parte de los que están de acuerdo con lo que está haciendo y de los que no, y ha recordado que la «peor época del PSC» fue la «herencia» del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero. «Ahora está salvando al PSC y a todos los demás, no sé de qué nos va a salvar, porque fue una herencia terrorífica», ha sentenciado.
Sobre Zapatero
El exmandatario también ha ironizado sobre el «gran esfuerzo» de Zapatero en su respaldo al PSOE en los comicios gallegos y vascos, cuestionando que los socialistas hayan dejado de ser una alternativa real de gobierno en estas dos comunidades.
Respecto a Galicia, González ha señalado que el «esfuerzo» de Zapatero en la campaña electoral condujo a que el BNG superase al PSOE, quedándose «a una distancia sideral de ser alternativa». «Siempre éramos la alternativa al PP en Galicia. Ahora somos la tercera fuerza», ha subrayado.
También ha afeado el tono triunfalista de Sánchez con el resultado en País Vasco pues, según ha recordado, el PNV y Bildu han logrado el 80% de la representación en el Parlamento regional frente al 15% del PSE. «Pero dicen 'tenemos la llave del gobierno'. Pues un día se va usted a comer con papas las llaves, porque lo que tiene que hacer es gobernar», ha respondido González, a la vez que ha planteado si los socialistas vascos van a ser «alguna vez alternativa» o va a ser «subsidiario del PNV o de Bildu».
«Los dirigentes del partido no me quieren a mí», añadió su actual relación con el PSOE.
Reacción desde el Gobierno
El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha lamentado el «tono hiriente» de Felipe González en sus críticas hacia el Ejecutivo de Pedro Sánchez y le ha recordado que esta es «otra época» de la que a él le tocó gobernar.
«Cualquier persona, faltaría más, es libre de opinar y de decir lo que quiera», ha comentado Albares, en una entrevista en RAC1. «Lo que yo no comprendo es por qué hay ese tono hiriente o de herir para expresar su opinión», ha añadido, asegurando que él no participa «de ese tipo de hacer comentarios o de estar en política».
González «fue un gran presidente del Gobierno y marcó una época y no cualquiera», «tuvo sus circunstancias, tomó sus decisiones». «Todos podemos opinar libremente sobre ellas», ha añadido, esgrimiendo que «esto es otra época, son otros momentos y el Gobierno de España toma adecuadamente las decisiones».
En cuanto a las críticas del expresidente a la Ley de Amnistía que se aprobará la próxima semana, Albares ha sostenido que «cualquier persona que mire a Cataluña en estos momentos comprende» que no solo «no está en peligro» sino que «está francamente mejor que hace unos años y eso se debe a las decisiones tomadas por el Gobierno».