El juez Peinado investiga a la mujer de Sánchez, Begoña Gómez, por los presuntos delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios
16 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El PSOE y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hacen frente actualmente a varios casos de presunta corrupción.
Caso Begoña Gómez
Tráfico de influencias. En el caso que afecta a Begoña Gómez, esposa de Pedro Sánchez, se investigan los presuntos delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios. El caso se refiere a los dos másteres y la cátedra que impartía Gómez en la Universidad Complutense. Según la investigación, Gómez recibió en la Moncloa al rector de la Complutense, Joaquín Goyache, también imputado, antes de que se concediera la cátedra a la mujer de Sánchez pese a no ser licenciada. Se investiga también al empresario Juan Carlos Barrabés, impulsor económico de los proyectos de Gómez, que habría recibido después contratos del Gobierno pese a que sus ofertas no eran las mejor puntuadas económicamente.
Caso Koldo
Comisiones por mascarillas. El caso Koldo se refiere a una trama de corrupción por el presunto cobro de comisiones por parte del empresario Víctor de Aldama y Koldo García, el exasesor del exministro de Transportes Jose Luis Ábalos, tras haber recomendado a diferentes ministerios y comunidades autónomas la contratación a la empresa Soluciones de Gestión como suministradora de mascarillas en la pandemia del covid-19. Ábalos, expulsado del PSOE, se encuentra al borde de la imputación.
Caso hidrocarburos
Concesión para operar. Se investigan sobornos y comisiones ilegales por la concesión de una licencia para operar en el mercado de hidrocarburos a la empresa Villafuel S. L. Estarían implicados entre otros Víctor de Aldama y Koldo García. La empresa cometió presuntamente un fraude a Hacienda de 182 millones de euros.
Otros casos
De Tito Berni a la Faffe. El caso Mediador investiga una trama corrupta que ofrecía a empresarios ventajas en la contratación pública a cambio de sobornos. Los implicados son Juan Bernardo Fuentes Curbelo, exdiputado socialista, conocido como Tito Berni, su sobrino Taishet Fuentes, el general retirado de la Guardia Civil Francisco Javier Espinosa Navas y Marco Antonio Navarro Tacoronte alias el Mediador. Fuentes Curbelo renunció a su escaño de diputado del PSOE. En conexión con el caso ERE, en el caso Faffe se investiga a la Fundación Andaluza Fondo Formación y Empleo (Faffe) por presuntos casos de enchufismo a allegados y familiares de socialistas. El ex director de la Faffe, el socialista Fernando Villén, ha sido condenado a seis años de cárcel por los pagos en prostíbulos con tarjetas bancarias de la entidad, dependiente de la Junta.
La Fiscalía de la UE denuncia la falta de medios para luchar contra la corrupción en España
Kövesi ve inaceptable que el Supremo les quite el caso Koldo por falta de recursos
Mercedes Lodeiro
La falta de medios en la Justicia es un lastre. El Tribunal Constitucional ya alertó hace tiempo en alguna sentencia de esa deficiencia y de que la situación vulnera derechos fundamentales. A pesar de ello, el Gobierno no solo no ha puesto remedio a la carencia, sino que además arremete con frecuencia contra los jueces.
El lunes, fue el ministro de Transportes, Óscar Puente, quien a raíz de la querella del PP contra el PSOE por el caso Koldo aseguró que la «incapacidad» de la oposición llega «hasta el punto de que han decidido subcontratar con los jueces».
La semana pasada, la fiscala general europea, Laura Kövesi, durante una visita a Madrid, donde se reunió, entre otros, con el ministro de Justicia, Félix Bolaños, alertó de las penurias que sufre su departamento en España para ejercer su competencia sin obstáculos jurídicos y materiales. Kövesi reclamó más medios humanos al Gobierno y acceder sin restricciones a las bases de datos de las instituciones para poder investigar con mayor diligencia.
La jefa de la Fiscalía comunitaria puso un ejemplo gráfico con el caso Koldo, la presunta trama de comisiones en la adquisición de mascarillas en plena pandemia, que instruye un juez de la Audiencia Nacional. Kövesi exclamó que «no se puede aceptar» que el Tribunal Supremo decante la competencia del caso en favor de la Audiencia «por la falta de recursos» en la Fiscalía Europea, cuyo cometido central es investigar el fraude de fondos comunitarios, informa Efe.
Lo que necesitan, dijo, son unidades policiales para poder instruir con efectividad. «Queremos nada más y nada menos lo que ya existe en España con la estructura de la Fiscalía Anticorrupción. Soy una gran fan de este modelo», admitió. Y añadió que sin medios la Fiscalía Europea no puede investigar causas como la de Koldo.
Aun así la también ex fiscala general y de anticorrupción en Rumanía apuntó que ellos continuarán investigando la «corrupción en España». «Estamos aquí para quedarnos», avisó. A la Justicia europea sí fueron derivados por el juez Juan Carlos Peinado los contratos otorgados a una UTE en la que participó una sociedad del empresario Juan Carlos Barrabés, y que se habría hecho con adjudicaciones públicas de Red.es financiadas con fondos europeos. «Hay mucho en juego», subrayó Kövesi, según recoge Efe.
«Testimonio anónimo»
Y si el lunes Puente cargó contra la magistratura y el PP por la querella que este interpuso al PSOE, diciendo que es «escandaloso» ver a la secretaria general de los populares, Cuca Gamarra, anunciando una querella por financiación ilegal en la sede de Génova, ayer fue la ministra portavoz Pilar Alegría quien afeó a la Justicia que acepte una denuncia —el juez pidió a la Fiscalía que informe si se acepta o no— sustentada en un «testimonio anónimo» de una noticia publicada por una «página web», en la que se decía que un empresario, sin especificar más, afirmó haber acudido a Ferraz con una bolsa conteniendo 90.000 euros. A mayores, censuró que el PP recoja esa información, la «amplifique» y la ponga «a disposición de la Justicia».
Se trata de la misma reprobación que en su día se hizo a Manos Limpias cuando presentó la denuncia contra Begoña Gómez basándose «solo» en recortes de prensa, que, según admitió luego el pseudosindicato, contenían falsedades.