Salomé Pradas exime de responsabilidades a Mazón y alega que no tenía experiencia en emergencias

ESPAÑA
La exconsejera aportó al juzgado un listado con sus llamadas el día de la dana
16 abr 2025 . Actualizado a las 20:55 h.Entre gritos de protesta y decenas de periodistas, la exconsejera de Interior y Justicia de la Generalitat Salomé Pradas y el exsecretario de Emergencias Emilio Argüeso accedieron a la Ciudad de la Justicia de Valencia para declarar como investigados en el juicio que investiga las responsabilidades de la dana.
La primera fue Pradas. Su abogado pidió que no se grabara la comparecencia —la jueza aceptó la solicitud— y solo respondió a preguntas de su defensa. La exdirigente eximió de culpas al que fuera su superior, el presidente autonómico, Carlos Mazón. Según fuentes presentes en la declaración y publicadas por Europa Press y Efe, Pradas dijo que el fatídico envío de la alerta a los móviles de los valencianos (efectuada a las 20.11 horas de aquel 29 de octubre) se produjo porque siguieron las indicaciones de los técnicos. Pradas reconoció que no contaba con experiencia en emergencias. Licenciada en Derecho, ocupó la cartera de Interior y Justicia desde julio hasta noviembre, tras la salida de Vox del Gobierno valenciano. Días después de la tragedia, aseguró en la televisión pública valenciana que, hasta el mismo día de la tragedia, desconocía la existencia del sistema Es-Alert.
Pradas explicó que, de todos los participantes en el Cecopi, solo había dos perfiles institucionales: la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, y ella. Considera responsable de la tragedia a la representante del Ejecutivo porque como codirectora del órgano gestor.
Su defensa aportó su listado de llamadas el 29 de octubre. Entre ellas se incluye comunicaciones con Carlos Mazón, aunque no ha trascendido ni el número de llamadas ni si fueron atendidas o no. El jefe de Gobierno, como ha declarado desde el inicio de esta causa, evitó pronunciarse ayer.

Sin datos del barranco del Poyo
Las riadas desbordaron barrancos y ríos. Entre ellos, el del Poyo, que atraviesa decenas de municipios. Pradas explicó que nunca le avisaron de que podría desbordarse. Puntualizó que entre las 13 y las 16.00 horas la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) reflejaba un descenso del caudal. Según la exconsejera, no fueron conscientes de la alarmante situación hasta las 18.43 horas.
Tras Pradas, llegó el turno de Argüeso. El exsecretario de Emergencias descargó responsabilidades sobre su número dos, que sigue en su cargo, Jorge Suárez. Según su testimonio, este le dijo que «no había que hacer caso al 112, porque en un accidente de circulación llaman 50 personas». El 29 de octubre, este servicio de emergencias recibió, según comunicó la jueza instructora, 19.821 llamadas. Argüeso añadió que Pradas le ordenó a Suárez que activara el nivel 2 de emergencias y que convocara al Cecopi a las tres de la tarde. Este órgano se activó dos horas más tarde.
Argüeso relató que ni Suárez ni el presidente de la CHJ, Miguel Polo —ambos presentes en el Cecopi— le informaron de la crecida del Poyo. Él, según dijo, acudió a la sede del 112, hastiado porque nadie respondía a los rescates que le solicitaban. Allí, logró salvar «muchas vidas». Argüeso remitió días atrás un informe pericial al juzgado, en el que relata que el 112 está saturado y, a las 14.44 horas, le informa a la hoy vicepresidenta, Susana Camarero, que los barrancos «están a punto de colapsar».
La doble declaración tiene lugar días después de que el exjefe del Consorcio de Bomberos de Valencia, José Miguel Basset —se jubiló en marzo— afirmara que los bomberos forestales se retiraron del Poyo porque el caudal no era preocupante a las 14.30 horas. Argüeso criticó a Basset porque, a su juicio, se calló esta información.