
Más de 40 centímetros de longitud diferencias al Opel Corsa que se lanzó en el año 1982 del actual, que llega como la quinta generación de este modelo urbano. Desde 13.540 euros
11 mar 2015 . Actualizado a las 18:31 h.El aumento de tamaño de la carrocería dentro del segmento B al que pertenece el Corsa ha convertido a este coche en algo más que un modelo urbano. Su competencia más directa será el VW Polo, el Peugot 208 o el Ford Fiesta, pero esta quinta generación llega mucho más atrevida y atractiva que sus competidores. Las renovaciones, cuando no son solo un lavado de cara, sino totalmente estructurales, suelen dejar atrás al resto de sus modelos. Este es el caso del nuevo Opel Corsa.
Nada más verlo nos sorprende su frontal, en donde el capó se recorta dentro del espacio del vano motor y juega con los faros de diseño específico y gran tamaño. Los nervios se prolongan hasta el paragolpes en donde una calandra dibuja una sonrisa mediante un embellecedor cromado. En la trasera destacan sus pilotos en horizontal y una amplia defensa que se adentra hasta la aleta posterior. Como remate, unos deflectores en negro le confieren una imagen más deportiva. Su aspecto en global es el de un coche compacto, bien posicionado sobre la carretera, con aplomo y cierto aspecto premium.

Es precisamente en su interior donde más nos sorprende. Los materiales de tacto agradable hace ya años que llegaron al automóvil, primero fueron en los coches caros y ahora le toca el turno a modelos como este Corsa. Su salpicadero diseñado longitudinalmente ha ganado muchísimo en imagen, gracias también al diseño de elementos tan destacados como los relojes, el volante deportivo y la pantalla táctil central. Pero lo bueno es el conjunto de acabados entre asientos, paneles de puertas y salpicadero: aquí va un paso por delante del resto.
El comportamiento de sus motores es suave y sin apenas vibraciones. Sobre todo el motor de 3 cilindros que con tan solo un litro de cubicaje logra 115 caballos. En diésel, nos gustó el 1.3 CDTI, capaz de ofrecer 75 o 95 caballos y lograr consumos por debajo de los 3,2 litros. En cajas de cambios hay la posibilidad de montar automáticas de baja fricción capaces de impresionar por su suavidad a cualquier conductor. Pero lo mejor de este Corsa viene de la mano de sus sistemas de ayuda a la conducción. Sentado al volante avisa del ángulo muerto, pone y quita las largas, vigila si te sales del carril, ayuda a arrancar en cuestas, lee las señales y avisa a que velocidad debes ir en cada momento, e incluso si puedes colisionar y, sobre todo, conecta tu smartphone al coche, pudiendo manejarlo con mensajes de voz sin apartar la vista de la carretera.
A EXAMEN
EL CHASIS
Centro de gravedad más bajo. Los ingenieros han retocado el nuevo chasis logrando bajar el centro de gravedad en cinco milímetros con respecto al modelo anterior, algo que se deja notar en la estabilidad en curvas y a lo que también contribuye un subchasis mucho más rígido y un cambio en la geometría, tanto de la suspensión delantera como trasera, que permite una adecuada combinación de eficacia y confort. En la parte trasera, el chasis ofrece unos carriles extraíbles para llevar las bicis, denominado Flex-Fix.
LA DIRECCION
Más precisa y directa. Para mejorar el tacto de la dirección, elemento importante en un coche de marcado carácter urbano, Opel ha cambiado su piñón, brazo intermedio y sobre todo la calibración de su software, logrando así una mayor precisión, estabilidad, y tacto al volante. Un botón en el salpicadero con la palabra City logrará que el conductor tenga que hacer un menor esfuerzo para mover el volante en maniobras tan rutinarias como aparcar.
LOS SISTEMAS DE AYUDA
Pendientes del conductor. Así es como viven algunos sistemas de ayuda del nuevo Corsa, como por ejemplo el reconocimiento de las señales mediante una cámara frontal denominada Opel Eye. También nos avisará si nos estamos saliendo del carril o si existe una alerta de colisión frontal. Las luces largas ya se ponen y quitan solas y en las cuestas el coche no se va para atrás al arrancar.
EL PARABRISAS
Calefactable. Al igual que la luneta térmica del cristal trasero, ahora el Corsa equipa un parabrisas calefactado que permite el deshielo en unos segundos y por supuesto sin las molestas tiras eléctricas a la vista. Ideal para estos días de frío.