Junto a Philip Glass y Michael Nyman, Wim Mertens está considerado como uno de los grandes exponentes de la música minimalista. En los años ochenta se hizo conocido con temas como Close cover , Struggle for pleasure y Maximizing the audience y su popularidad todavía se disparó más con el estreno de la película El vientre del arquitecto , del siempre controvertido Peter Greenaway, cuya banda sonora lleva la firma del cantante, pianista y compositor belga.
Sin embargo, y a pesar de estar muy ligado a todo ese movimiento new age , Wim Mertens es difícilmente encasillable. En primer lugar, porque nunca ha dejado de experimentar y siempre ha apostado por reinventarse mediante la búsqueda de nuevos caminos de expresión. Y en segundo lugar, porque su fidelidad a la melodía le han hecho ganarse el favor del público actual, algo que no es muy habitual cuando se habla de música culta contemporánea.
En Ferrol, Wim Mertens se presentará ante el público con una propuesta musical en formato Ensemble. Y así, junto a su inseparable piano y su inconfundible voz, sobre el escenario del teatro también se darán cita dos violinistas (Tatiana Saamouil y Bert Van Laethem), una viola (Tony Nys), un violonchelista (Karel Steylaert) y un contrabajista (Ruben Appermont).
Increíblemente prolífico, Wim Mertens siempre ha sido muy alabado por la crítica en sus directos. Porque es ahí, sobre el escenario y a pocos metros del público, donde el músico «demuestra que hoy en día la composición puede estar estrechamente ligada a la propia performance, y cómo esa performance y la interpretación se conjugan para crear un acontecimiento único», según reza su nota promocional.
Quienes quieran verlo en acción no deben desaprovechar la oportunidad, porque tras actuar mañana en Guipúzcoa y el sábado en Ferrol, el belga volará hacia tierras italianas.