Los trabajadores del centro asistencial Souto de Leixa mantienen el encierro al que daban inicio la pasada semana en señal de protesta por el cambio en el modelo de gestión que la Xunta pretende implantar en estas dependencias. José Alén, portavoz del colectivo, ha destacado esta mañana que, tras recibir el apoyo de colectivos y particulares ante sus reivindicaciones, el consejo escolar del centro también ha respaldado sus protestas.
Así, un primer grupo, compuesto por una docena de padres de alumnos del centro, se ha incorporado esta misma mañana al encierro que los trabajadores desarrollan en el Palacio Municipal. Alén ha definido este respaldo como «el apoyo más importante» y ha subrayado que «su posicionamiento coincide con el nuestro».
El representante de los encerrados ha manifestado que la petición de ambos grupos busca el mantenimiento de la calidad en los servicios del centro «en el marco de un centro público». Alén ha destacado que la de los trabajadores es una demanda que desde el colectivo de padres «ven lógica tras cuarenta años de actividad», en un centro «referente en la asistencia a discapacitados».
Los trabajadores del antiguo Carmen Polo -ahora dividido entre el Souto de Leixa y el Terra de Ferrol- iniciaron el encierro indefinido el pasado día 4 de noviembre con el fin de que el centro continúe siendo público.
Respaldo del gobierno local
Por otra parte, el alcalde de Ferrol, Vicente Irisarri, mantuvo un encuentro esta mañana con los trabajadores del centro, y ha reiterado su apoyo personal y el del grupo de gobierno a sus demandas, respaldadas recientemente en el pleno municipal. La solución, han indicado desde el gobierno local, «depende única e exclusivamente da Xunta de Galicia».