Continúan atrapados en Libia dos marinos de Narón y Cedeira

R.P.P. / A.B. FERROL / LA VOZ

FERROL

El barco carecía ayer todavía de permiso para abandonar el país

01 mar 2011 . Actualizado a las 14:04 h.

El naronés y el cedeirés que forman parte de la tripulación de un buque cementero que trabaja desde hace meses en la capital de Libia continúan atrapados por los efectos de la revuelta en el país. Aunque su familia daba por hecho que el pasado domingo el Corregidora había conseguido salir a aguas internacionales, ayer, al cierre de esta edición, su situación continuaba siendo la de los últimos días: el carguero aguarda un último permiso de aduanas para poder hacerse a la mar y abandonar el puerto libio.

José Manuel Marín Rico, un marino nacido en Ferrol hace 63 años, pero residente en Narón, y un vecino de Cedeira cuya identidad no ha trascendido, forman parte de la plantilla del buque, que intenta desde hace más de una semana dejar Libia. A bordo viaja otro gallego -de A Pobra do Caramiñal, que ejerce como capitán- y dos españoles más, uno de Asturias y otro de Andalucía. La multinacional Cemex (Cementos Mexicanos), la empresa para la que se contrató el barco, confirmaba ayer la situación del buque.

Su vicepresidente regional de Comunicaciones, Relaciones públicas y Sostenibilidad, Tim Stokes, que actuó como portavoz desde el Reino Unido, señalaba estar a la espera de la autorización para que el barco se pudiese hacer a la mar. Aunque inicialmente dijo que esperaba que el barco pudiese salir ayer, sin destino confirmado, más tarde advertía de que era «imprevisible» conocer la fecha exacta. «Están intentando agilizar los trámites al máximo, pero hasta el momento de la salida resulta imposible confirmarlo», afirmó. No obstante, garantizó que sus ocupantes están a salvo y que está en contacto con la Embajada española en Trípoli.

La esposa de Marín Rico, con la que se comunicó su marido en los últimos días, declinó ayer facilitar información alguna sobre la situación. Su esposo tampoco atendía las llamadas de teléfono que sí contestó en jornadas anteriores. La familia mostró en los últimos días su angustia por la proximidad del buque a la zona de conflicto -el barco está atracado en Trípoli, a poco más de un kilómetro de la Plaza Verde-. José Manuel Marín, que reside en Ciudad Europa, se encuentra en el lugar desde el 18 de enero y tenía previsto permanecer allí hasta abril.

El Ministerio de Asuntos Exteriores se limitó ayer a confirmar que restan cinco españoles por abandonar Trípoli y que se está organizando su evacuación «lo antes posible». Fuentes oficiales no precisaron si se trata de los cinco del «Corregidora», aunque la embajada española conoce su situación. Desde el Gobierno se aseguró que los cinco españoles que tienen constatados se encuentran «bien» y «fuera de peligro».