La dotación de la fragata registró una embarcación sospechosa de piratería
18 dic 2012 . Actualizado a las 18:48 h.La fragata F-104, con base en Ferrol, continúa desarrollando su operativo como buque de mando de la operación Atalanta contra la piratería en aguas del Índico. En las últimas jornadas, además, su actividad se ha acentuado de manera notable.
Así, desde el propio buque se informa que entre el día 10 y el 14 del presente mes se encontraba navegando para realizar su primera escolta de un mercante para evitar los ataques piratas.
Se trata de una de las tareas habituales de la misión. Era, en concreto, el Canarsie Princess, perteneciente al Programa Mundial de Alimentos. El tránsito se hizo «por aguas del mar Arábigo y golfo de Adén hasta Yibuti».
En esa franja, además, se realizó el primer abordaje a un dhow, la denominación que reciben los esquifes que suelen utilizar los piratas para sus ataques. Se informó de que se trataba de una embarcación de origen iraní «sin que se encontrase nada sospechoso que lo pudiese ligar a la piratería».
Destacan que «se trata de una embarcación de carga típica de la zona y utilizada en algunas ocasiones como buque de madre de los piratas somalíes».
Además de los cometidos operativos, el resto del tiempo tampoco se desaprovecha por parte de la dotación de la Méndez Núñez.
Indican que también se aprovecharon esas jornadas «para realizar varios ejercicios, entre ellos uno de evacuación médica, por medio de nuestro helicóptero, y un escenario en el que se simuló un posible ataque desde tierra de una aeronave a baja cota».