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El gobierno local pide a Augas de Galicia la mejora del embalse
23 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Los trihalometanos no son el único enemigo de la red de agua potable ferrolana. En plena fase de recuperación de la crisis del agua ayer se conoció que existen «un lote» de notificaciones de las consellerías de Medio Ambiente y Sanidade por la presencia elevada de un tipo de bacteria, las cianobacterias, en el embalse de As Forcadas. Y que en varias ocasiones recientes -la última el pasado mes de marzo y anteriormente en junio del pasado año- habría sido suficiente para activar una alerta en el Sinac, el Sistema de Información de Aguas de Consumo, dependiente del Ministerio de Sanidad. En teoría, habrían obligado a tomar medidas correctoras. El gobierno local estudia ahora esa documentación para saber si realmente fue así y si entonces, cuando se produjeron esas alertas, fueron comunicadas o no al Concello.
Así lo indicó el alcalde, Jorge Suárez, que explicó que estos datos forman parte de la investigación que está realizando el Ayuntamiento. Y para la que se ha requerido el análisis de los cuatro últimos años, tras comprobar que los niveles de trihalometanos se iban incrementando paulatinamente en el mes de junio. Ahora se intenta averiguar si esa tendencia al alza era habitual al inicio de los veranos anteriores o qué sucedió en esta ocasión para que subiesen.
El concejal de Servizos, Bruno Díaz, informó ayer en comisión de todo lo ocurrido en los últimos días. E incidía también en esas «alertas» detectadas en el pantano valdoviñés y notificaciones «cotiás» sobre esta circunstancia. Y aludió que, precisamente, una de las causas del problema de los trihalometanos «ten que ver coa elevada carga orgánica no embalse das Forcadas». Recuerda que la calidad de esta agua es competencia de Augas de Galicia. Y por ello, pidió que se incluya la mejora del embalse dentro de los planes de la Xunta.
Por otra parte, argumentó que la ley contempla casos de excepcionalidad en los que permitiría no haber restringido el consumo aún con niveles excesivos de trihalometanos si se demuestra que es «unha situación reversible no curto prazo», como ocurrió en esta ocasión. No obstante, señala que no le corresponde a él dictaminar si se sobreactuó en esta ocasión.