Objetos del pasado para la generación del futuro

FERROL

JOSE PARDO

Un «walkman», un VHS o un Nokia protagonizan una actividad escolar en el colegio La Salle

31 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Unos objetos que cualquiera de una cierta edad podría reconocer se han convertido en auténticas piezas de museo para las nuevas generaciones. «No sé que es esto», comenta Sandra. En sus manos, un visor de diapositivas, a través del que ve una imagen de La aventura de la vida de Félix Rodríguez de la Fuente. La colección entera, así como el visor, fueron un regalo de su abuela a su madre. ¿Y qué hace ahora en un aula del colegio La Salle? Formar parte de una actividad impulsada en quinto de Educación Primaria por su tutor, Mateo Ruiz (31 años), que inspirado en un ejercicio que encontró en el libro de Matemáticas llenó la clase de objetos del pasado y los aprovechó para trabajar diferentes asignaturas.

El primer día que trajeron estos elementos, Mateo preparó una tienda de antigüedades. El juego consistió en calcular su precio justo -algo que también recordó al mítico programa-, de modo que quien más se acercase, acababa llevándoselo. En la jornada de este martes, cuando estuvo presente La Voz, la actividad fue El precio de la historia, y con ello trabajaron las conversiones de moneda. Además, esto se completó con descripciones sobre su historia, de modo que a Matemáticas se sumaban Sociais o Lengua.

Las exposiciones ante la clase fueron el momento cumbre de la actividad. Además de Sandra, una de las que mostró su elemento este segundo día fue Antía. Un VHS de El Rey León 2 que, según explicó, había valido 1.995 pesetas. «Sí que lo veo muy grande», decía. Y es que nunca llegó a usar uno de esos, al empezar ya en la era del DVD. Ahora ve las películas «en el cine, la televisión o en el ordenador». Por su parte, Sabela se trajo una máquina de escribir de 1997 que «aún funciona». «No le falta ninguna tecla, era de mi madre. La verdad, la veo útil», comenta, aunque nunca la probó.

JOSE PARDO

Otro objeto que les pareció más antiguo de lo que realmente es fue un Nokia 3310. «Todo adolescente tenía uno. Es muy pesado, tiene la pantalla pequeña y valía más de lo que piensas», describió su dueña, Lucía, que respondió claramente «¡no!» cuando se le preguntó si lo preferiría a uno de los modernos.

Asimismo, salió al estrado Pablo, que mostró un teléfono fijo con dial de rueda. «Dispone de diez teclas y en los agujeros se introduce el dedo para marcar», explicó, aunque a continuación fue incapaz de marcar un número. «Sí que es difícil», sonreía. Su profesor lo ayudó y al momento cogió la dinámica. Era la primera vez, está claro, que usaba este objeto que todavía queda en más de una casa.

Además de los citados, apareció por clase un billete de 100 pesetas, de Isabel, que era de su madre cuando era joven. «Lo veo más bonito que los de ahora», remarcó. Otros elementos fueron un reloj de cuerda y otro de solapa, un casete, un radiocasete, un walkman, un vinilo - «¿hace ruido, suenan canciones?», se preguntaba la alumna-, un gramófono o un trol.

En definitiva, un viaje al pasado reciente que llenó de curiosidad la mente de los niños de su clase de La Salle y, de paso, les valió para aprender números y letras.

«Son alumnos movidos; cuanto más significativo sea el aprendizaje, mucho mejor»

Antes de las exposiciones delante de los compañeros, los alumnos fueron cubriendo unas fichas de descripción bien completas de cada uno de los objetos. Las preguntas se dividieron en seis bloques, con varias preguntas cada uno:

-Historia: ¿Cómo has conseguido este objeto?

-Rasgos físicos: ¿Hace ruido?; ¿Tiene olor?; ¿Cuáles son sus dimensiones?; ¿Cuánto pesa?; ¿Cuál es su forma?; ¿De qué color es?; ¿Está completo, roto o restaurado?

-Construcción: ¿Cuándo se fabricó?; ¿De qué material está hecho?; ¿Cómo lo elaboraron?

- Función: ¿Para qué y cómo se usaba?; ¿Sirve actualmente?; ¿Hay hoy en día objetos que cumplan la misma función?

-Diseño: ¿Qué es lo que más te llamó la atención del diseño del objeto?; ¿Te parece que el diseño es apropiado para el uso que se le da al objeto? ¿Por qué?

-Valor: ¿Cuánto podría costar aproximadamente?; ¿Quiénes y cuándo lo usaban?; ¿Por qué lo expondrías en el museo?

«Aprovechamos que no son cosas al uso para ellos. Intentamos que fueran de la época de cuando sus padres eran jóvenes, aunque algunos se fueron para atrás. Entre unos y otros se enteraron de la historia de varios objetos», cuenta el tutor de quinto.

«Solemos trabajar este tipo de dinámicas habitualmente, trabajar varias asignaturas desde una misma actividad. Son alumnos muy movidos. Entonces, cuanto más significativo sea el aprendizaje, mucho mejor. Si yo solo les cuento y les enseño fotos de cuándo no usábamos un móvil, no lo entienden. Por eso, la mejor manera es que lo vivan», resume Mateo, que forma grupos «cooperativos, cada uno con una función, para resolver cada uno de los ejercicios planteados».