La F-101 deja Ferrol para operar con la OTAN en el mar del Norte: «Si pasa algo, se resolverá con solvencia»
FERROL
La fragata Álvaro de Bazán, con una dotación de 216 marinos, permanecerá desplegada hasta finales del mes de junio como parte de la operación «Brilliant Shield»
21 feb 2023 . Actualizado a las 10:51 h.Pese a ser un día laborable y primera hora de la mañana, el bullicio reinante en la puerta del Parque del Arsenal Militar de Ferrol denotaba que la de este miércoles era una jornada de despedidas. Familiares y amigos de la dotación de la fragata Álvaro de Bazán (F-101) se congregaron en dependencias militares para brindar soporte a los suyos antes de su partida a aguas del mar del Norte para unirse a la operación Brilliant Shield de la SNMG-1 de la OTAN, en un despliegue que presumiblemente se prolongará hasta finales del mes de junio.
Arropados por la música de la Banda del Tercio Norte, se sucedieron los abrazos, la toma de las últimas fotografías de grupo antes de la maniobra de salida y también los llantos. Entre los familiares congregados en el Arsenal, un pequeño sostenía un dibujo de un gran corazón acompañado de un mensaje conciso:«Te amo, papá». Su madre explicaba que, pese a ser un día de colegio, su hijo no ha querido faltar a la cita de despedida con su padre porque, agregaba, «siempre quiere estar, es duro estar tantos meses lejos de los tuyos y vernos aquí le da fuerza».
Ha sido esta también una jornada de primeras veces para algunos de los asistentes en la complicada misión de decir adiós desde tierra firme. «Mi hermano lleva 15 años en la Armada y es la primera vez que puedo venir. Su hijo no ha podido porque tenía escuela y aquí estoy yo para dar apoyo», explicaba este familiar de otro de los miembros de la dotación. También las lágrimas continuadas de una abuela encontraron consuelo en el propio personal de la Armada, que no dudó en acercarse para disipar toda preocupación: «Está en buenas manos, no se preocupe que se marcha con su segunda familia», señalaban a la mujer que, pese a los tres años de servicio de su nieto, confesaba, todavía no se acostumbra a este momento.
Compromiso con la OTAN
Ya a bordo del buque, el capitán de navío comandante de la 31ª Escuadrilla de Superficie, Gonzalo Leira Neira, dirigió unas palabras de aliento a la dotación y señaló que, con su partida, la F-101 «inicia un nuevo despliegue en el Grupo Naval Permanente de la OTAN número 1, al igual que los otros buques de la 31ª Escuadrilla de Superficie que estuvieron a lo largo de todo el año pasado desplegados en el Mediterráneo».
Asimismo, el capitán de navío puso en valor la contribución de la Álvaro de Bazán en materia de seguridad marítima y defensa colectiva. «Después de una intensa preparación, que he querido destacar a la dotación, y con un altísimo grado de alistamiento como, además, tuvo ya la ocasión de demostrar en su integración con el grupo de portaviones Gerald Ford norteamericano el pasado semestre, les he trasladado que tengo el convencimiento de que pueden cumplir la misión con la máxima eficacia y han mostrado en todo el período de preparación un compromiso enorme y un gran espíritu de equipo. Son un ejemplo para los que formamos la 31ª Escuadrilla», subrayó.
También el capitán de fragata, Jesús Viñas, destacó la ardua preparación de la dotación en estos meses. «El barco está listo para salir a la mar, con todas sus capacidades. Salimos 215 personas; del buque somos 182 y contamos con una unidad de embarcada, un equipo operativo de seguridad y un role 1 medical. Estamos listos. Nos hemos preparado para este momento, son 241 días desde que comenzó el ciclo operativo fuera de la base, con un 80 % del tiempo en la mar. Estamos con confianza de que tenemos un barco excepcional y la mejor dotación», apuntó antes de partir al puente de mando para dirigir la maniobra de salida.
Cabe recordar que las fragatas Almirante Juan de Borbón, Méndez Núñez, y Cristóbal Colón, con base en Ferrol, vienen de participar hace escasos días en los ejercicios MAR 23-1 de la OTAN en aguas de Galicia, Cádiz y Portugal. Tan solo la fragata Blas de Lezo, en misión humanitaria en Turquía, y la Álvaro de Bazán, pendiente de incorporarse a la misión Brilliant Shield, quedaron fuera de estas maniobras de las que tomaron también parte la Marina Real Canadiense y la US Navy estadounidense.
El buque Patiño se sumará a la operación
Con relación a la actividad prevista durante estos meses de despliegue, el capitán de navío comandante de la 31ª Escuadrilla de Superficie avanzó que «estaremos participando en el Mar del Norte y Mar Báltico y realizaremos ejercicios importantes como el Joint Warrior y el Baltops. Recalaremos en los puertos de la zona para darles tranquilidad a nuestros aliados de que estamos haciendo presencia naval activa en la zona, monitorizando el tráfico y velando porque los patrones sean los más normales y seguros».
Asimismo, desde la Armada señalan que está previsto que a la fragata Álvaro de Bazán se sume el buque Patiño, durante los meses de mayo y junio, para la presente operación. Una actividad que, destaca el comandante de la 31ª Escuadrilla, se enmarca dentro de la normalidad de preparación de las dotaciones y que evidencia, además, «nuestra contribución a los grupos de la OTAN, que ha sido una constante durante los últimos 30 años y que se ha materializado de forma ininterrumpida el pasado año en el Mediterráneo».
Tras el acto protocolario de despedida y al ritmo de la canción Ferrol de Los Limones, la F-101 puso finalmente rumbo a aguas del mar del Norte para brindar soporte y monitorizar el tráfico en los puertos de la zona, con la finalidad de «demostrar que los aliados juntos somos fuertes, que estamos cohesionados y que si pasa algo se resolverá con solvencia», aseveró el capitán de fragata, Jesús Viñas.
