Un trabajador de un taller de Ferrol pide una incapacidad porque el barniz le causa dermatitis

Bea Abelairas
B. abelairas FERROL / LA VOZ

FERROL

Sede del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia
Sede del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia PACO RODRÍGUEZ

Un pintor de coches de 32 años

05 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Un pintor de coches de 32 años emprendió una batalla judicial para conseguir una incapacidad, porque tras trabajar en varios talleres de la comarca se percató de que uno de los barnices que usaba le hacía daño. Sufría los síntomas de una dermatitis, motivo por el que la mutua le diagnosticó esta dolencia e inició un informe por si existía enfermedad laboral.

Sin embargo, el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) confirma las sentencias de otros tribunales y deniega una prestación por incapacidad permanente, ya que considera que el trabajador no sufre unas lesiones que acrediten que «padece un grado suficiente de disminución de su capacidad laboral para ser constitutivas de una incapacidad permanente».

El fallo recoge que el trabajador sufrió otro accidente laboral en el 2018, por el que estuvo de baja, y un año después «fue diagnosticado de alergia a resina epoxi, por lo que la empresa le asignó nuevas tareas y funciones y su clínica alérgica desapareció». Así, las cosas el TSXG recuerda que la «incapacidad permanente contributiva es la situación del trabajador que, tras haber estado sometido al tratamiento prescrito, presenta reducciones anatómicas o funcionales graves» y que estas reducciones deben ser «previsiblemente definitivas», y que disminuyan o anulen su capacidad laboral. Algo que no sucede en este caso.