Tomás Vázquez, reumatólogo del CHUF: «La osteoporosis se puede prevenir con calcio, ejercicio y vitamina D»

FERROL

En la imagen, el reumatólogo del CHUF Tomás Vázquez, en el vestíbulo del Marcide
En la imagen, el reumatólogo del CHUF Tomás Vázquez, en el vestíbulo del Marcide JOSE PARDO

De la mano del ciclo de las Charlas Saludables, el miércoles hablará en A fundación sobre una dolencia «silenciosa» que «no duele hasta que rompe»

20 nov 2023 . Actualizado a las 12:08 h.

A menudo se habla de ella como una enfermedad «silenciosa», porque no da la cara hasta que se produce una fractura. Y en la mayoría de los casos tiene rostro femenino, aunque los hombres también la pueden padecer. Es la dolencia ósea más frecuente y se llama osteoporosis. De cómo prevenirla y tratarla hablará con todo detalle el próximo miércoles, día 22, en Afundación —a las 20.00 horas y con entrada gratuita— Tomás Ramón Vázquez Rodríguez (Monforte de Lemos, 1978), reumatólogo del CHUF. Bajo el título La osteoporosis no duele hasta que rompe, la conferencia se enmarca en el ciclo Charlas saludables, que organiza La Voz de Galicia en colaboración con el Área Sanitaria de Ferrol.

—El título de la charla es muy elocuente, lo dice todo.

—Es que es así. La osteoporosis no duele ni da síntomas. Un buen día una persona da un mal paso, cae y se rompe una cadera. O echa una mano al suelo y se rompe una muñeca. Y hasta entonces pensaba: 'estoy bien' El gran problema es que, como no duele, no se piensa en ella, no se mira y no se previene.

—¿A quiénes afecta?

—Se estima que una de cada tres mujeres y uno de cada cinco hombres tendrán una fractura por fragilidad a lo largo de la vida.

—¿A más edad mayor riesgo?

—Así es. ¿Por qué? Pues porque el hueso no es algo fijo, sino que es un órgano vivo, en continua renovación. Y según el trabajo que hagamos con ese hueso, se puede renovar de forma más fuerte o de forma más frágil. Con los años nos movemos menos, hacemos menos ejercicio y la dieta a veces también se deteriora y todo eso hace que aumente el riesgo de padecer osteoporosis.

—¿Qué se puede hacer para prevenir su aparición?

—Lo primero que hay que hacer es pensar en ella, sobre todo las mujeres a partir de los 50 años, que ya están en la menopausia, porque en ese momento caen los estrógenos y se produce un cambio hormonal que hace que el deterioro del hueso sea más rápido. Como no tienen menopausia y siguen , los hombres padecen menos osteoporosis, aunque también la pueden sufrir, pero a edades más avanzadas, a partir de los 70 años.

—Y una vez que ya «pensamos en ella», ¿cómo hay que actuar?

—Después de esos 50 años en los que llega la menopausia, hay que hablar con el médico y ver la posibilidad de hacerse un análisis general para ver cómo están los niveles de calcio, fósforo, vitamina D y algunas hormonas. A la vista de los resultados, si el médico lo considera oportuno, también podría indicarse una densimetría, que es una especie de radiografía que mide la calidad del hueso. Si esa prueba revela que hay una densidad de hueso frágil, entonces habría que tomar medidas tanto higiénico-dietéticas como terapéuticas, con fármacos.

—Respecto a las primeras, ¿cuáles son las más importantes?

—La osteoporosis se puede prevenir con calcio, vitamina D y ejercicio físico. Básicamente, hay que llevar un dieta variada, rica en lácteos y otros alimentos con calcio; exponerse al sol entre 20 y 30 minutos al día para captar vitamina D, al menos en cara, cuello y brazos; y hacer ejercicio físico. Esta es la tercera pata para prevenir la osteoporosis y es muy importante porque hacer ejercicio obliga al hueso a reestructurarse de forma más dura. El sedentarismo y el no movernos aumentan mucho el riesgo. Hay que salir a caminar 30 minutos al día o cada dos días, pero hay que tener claro que hacer recados o ver escaparates no es caminar. El alcohol y el tabaco son otros factores de riesgo que también aumentan el riesgo y se pueden evitar.

—¿Es recomendable tomar lácteos enriquecidos con calcio?

—El organismo es listo y no va a absorber más calcio porque le demos más. Eso sí, si no le das el suficiente, entre 800 y 1.000 miligramos al día, no le va a llegar. Pero, insisto, con una dieta rica en derivados lácteos es suficiente, no hace falta recurrir a productos enriquecidos. Hay que tomar leche, yogures, queso... Y sirven igual sin son desnatados o sin lactosa, porque llevan calcio igual. Si no te gustan los lácteos, hay otros muchos alimentos que tienen calcio, como los pescados, en especial las sardinas con espinas, o las legumbres.

—Edad, sedentarismo, dieta pobre en calcio, falta de vitamina D, alcohol, tabaco... ¿Son estos los únicos factores de riesgo?

—Esos son los factores que podemos corregir para prevenir la osteoporosis, pero luego hay otros factores de riesgo sobre los que no podemos actuar, como estar tomando corticoides, ciertas enfermedades endocrinas, la artritis o los tratamientos que se utilizan para el cáncer de mama.

—¿Qué pasa cuando se rompe un hueso a causa de la osteoporosis?

—Cuando se rompe un hueso es mucho más probable que se rompa un segundo hueso. Y cada fractura deteriora la calidad de vida y aumenta el riesgo de otras enfermedades y de mortalidad. ¿Por qué? Por encamamiento, efectos secundarios... Quienes se rompen la cadera luego se mueven menos, la circulación empeora y los músculos se atrofian.

—¿Es una enfermedad que va a más o a menos?

—A más, pero porque está asociada a la edad y ha aumentado la esperanza de vida. La gente joven no sufre fracturas por osteoporosis salvo que tenga un problema endocrino o tumoral.

—Hablaba antes de la importancia de la vitamina D, pero en Galicia no siempre acompaña el sol.

—Hay casos en los que hacen falta suplementos para evitar esa falta de sol. En los países cálidos la incidencia es menor, porque la gente se expone más, y además, sale más a la calle y eso implica más movimiento. En cambio, los países nórdicos tienen la mayor incidencia de fracturas por osteoporosis, y eso a pesar de que allí se suplementa calcio y vitamina D de forma sistemática