Adiós al siempre sonriente Kiko Corzo de Xuvia: «Un amigo irrepetible, un hijo ejemplar»
FERROL
Fue auxiliar de farmacia en Freixeiro, Piñeiros y O Alto y falleció el pasado jueves tras una larga enfermedad; sus amigos le dedican hoy una misa en la iglesia de Santa Rita
13 may 2024 . Actualizado a las 16:18 h.A esa estirpe de personas que sonríen incluso en las tragedias pertenecía Kiko Corzo. Vecino de Xuvia, auxiliar de farmacia durante más de 40 años, Francisco Manuel Corzo Freire (conocido por todos como Kiko) fallecía el pasado jueves a los 62 años de edad. Y detrás deja a un grupo de amigos tan conmocionado que este lunes le dedicarán una misa a las 18.30 horas en la iglesia de Santa Rita. Rostro conocidísimo en Narón, siempre afable y siempre atento, trabajó en farmacias de Freixeiro, Piñeiros y O Alto siendo muy apreciado por todos sus clientes. «Un amigo irrepetible, un hijo ejemplar», así lo recuerdan sus amistades.
Su carrera profesional la empezó en la farmacia de la familia Freire, ubicada primero donde ahora está el Froiz de Freixeiro. Cuando abrió el centro de salud de Narón en Piñeiros, el establecimiento se instaló donde estuvo después el estanco de ese barrio. Y en los últimos años trabajó en la farmacia de O Alto, también de los Freire. Como indican sus amigos, «él era de una familia muy conocida de Casadelos, hace dos años murió su hermano Cristóbal también por una larga enfermedad y le queda viva su madre de 86 años».
Gran seguidor de los deportes por los medios de comunicación hasta el punto de que «podría participar en un concurso y ganarlo», era sobre todo «un excelente amigo, muy buena persona y afable, siempre con la sonrisa en la cara y dedicado en los últimos tiempos al cuidado de su madre».
Como lo recuerda su amigo Fernando Masafret, inseparable de Kiko junto a Laly Mouriz, «estos dos últimos años han sido muy duros para ti y los has llevado en el más absoluto silencio y discreción, has renunciado a muchas cosas y solo te has preocupado por el bienestar de tu madre siendo un ejemplo de hijo». Desde Xuvia lamenta que «con la marcha de Kiko también se va parte de la vida de sus amigos, fue mi confidente y compañero de viaje con muchos años de complicidad y risas».