Cupido llora con los ferrolanos Vanessa y Javi de Gran Hermano: «Llevamos días sin hablarnos»
FERROL
La pareja asegura que entró en crisis desde el domingo, cuando la cantante de orquesta se animó a regresar a Guadalix ante la perplejidad de su marido; su relación merece ya una película de Pedro Almodóvar.
13 nov 2024 . Actualizado a las 13:08 h.Cupido llora sobre Ferrol, Afrodita está triste. Adiós a las noches de pasión entre Vanessa y Javi, la pareja más ferrolana y más fogosa de Gran Hermano. Los dos componentes del grupo musical Carpe Diem andaban el sábado envueltos en una nube de felicidad por el centro comercial Odeón, de Narón. El domingo aparecían en El Debate de GH en Telecinco. Y sorpresivamente, en el programa Límite Gran Hermano de anoche irrumpía sorpresivamente el desamor: «Llevamos días sin hablarnos».
Se masca la tragedia, arrecia el drama. La decisión de Vanessa Bouza de aspirar a regresar a Guadalix, cuando ella forzó a su marido a marcharse tras ser expulsada, ha provocado el cisma sentimental de estos vecinos de Sequeiro (Valdoviño). El siempre sagaz Jorge Javier Vázquez lo corroboraba anoche ante la pareja, vestida de color vino (el Pantone de moda): «Tú estás aquí sentado como si fueras un convidado de piedra porque esta señora te sacó de la casa y abandonaste, te dejó como un cero a la izquierda». Y Javi le dio la razón: «Totalmente». Además, para más inri, Vanessa ha dejado de seguir a su marido en las redes sociales. En pleno 2024, este es el gesto inequívoco de que algo va mal en una pareja... o de que algo se trama quizás en una estrategia.
La colaboradora Belén Rodríguez fue la que confirmó que no hay diálogo entre Vanessa y Javi, algo confirmado por el presentador Jorge Javier: «Desde el domingo no os habláis, estáis cabreados que me he enterado». Se ciernen así cumbres borrascosas sobre esta historia de amor, más cercana sin embargo al costumbrismo del Almodóvar de los 80 que al goticismo de Emily Brontë. Porque en aquellas ya lejanas y agitadas noches de Guadalix, a Vanessa solo le faltaba emular a Carmen Maura con el «riégueme, riégueme» de La ley del deseo. Sea como sea, los ferrolanos siguen dando noches televisivas de gloria con ovación y vuelta al ruedo.