La popular aventurera que viajó de Zaragoza a China en bicicleta, en el Gulliver Fest: «Ferrol y su entorno es precioso, no tenéis nada que envidiar a otros sitios»

Carla Elías Martínez
Carla Elías FERROL

FERROL

CARLOS CARBALLEIRA

Sara Qiu contó en el festival su viaje de dos años: «Viajando sola he encontrado mucha hospitalidad»

13 ago 2025 . Actualizado a las 17:18 h.

¿Se imaginan recorriendo unos 16.000 kilómetros en bicicleta para llegar desde España hasta China? ¿Estar viajando sola durante dos años, atravesando quince países enfrentándose tanto a desiertos como a cordilleras? Esa es la aventura que completó Sara Qiu Ruan, nacida en Zaragoza y de origen chino, quien pedalada a pedalada llegó hasta Qingtian, la tierra de sus padres. Su viaje, que comenzó tras dejar su trabajo como product manager en una empresa tecnológica, fue mucho más que una ruta sobre dos ruedas: fue un proceso de transformación personal. «Uno de los mensajes principales que quiero transmitir es que, siendo mujer y viajando sola, he encontrado muchísima hospitalidad. En casi todos los países, familias que no me conocían me alojaron y me ayudaron sin esperar nada a cambio», relata. Turquía y Uzbekistán son, para ella, dos ejemplos claros de esa generosidad desinteresada que marcó su travesía.

Este viaje y un sin fin de experiencias fueron el plato fuerte del programa de charlas que acogió el fin de semana el Gulliver Fest de Narón, el festival de la cultura viajera que reúne cada año a cientos de aventureros de todo el país y del extranjero. «Me propusieron venir y encantada, es la primera vez que estoy por esta zona de Galicia», explica.

La vida de Sara es toda una aventura. No solo ha recorrido 15 países en este viaje, sino que en total, entre su travesía en bicicleta y su etapa de mochilera, ha visitado ya más de cuarenta, llegando a perder la cuenta exacta. «La verdad es que ya no sé la cifra concreta, si treinta y muchos o ya supero los cuarenta. Pero no son tantos», asegura. De todos ellos, Turquía ocupa un lugar especial en su corazón: «Estuve cuatro meses y medio y, en cada esquina, la gente me acogía casi por defecto. Es muy diversa y súper hospitalaria», agradece de corazón.

En su célebre aventura en bicicleta, a lo largo de 16.000 kilómetros, Sara cruzó 15 países, escapando de los extremos climáticos: evitó desiertos en verano y montañas en pleno invierno. La bicicleta, más que una meta deportiva, fue una herramienta para acercarse a las personas. «No era ciclista antes de esto, pero siempre he sido muy activa. Empecé a entrenar un par de meses antes de empezar el viaje grande», recuerda. Su camino culminó en enero de 2025, justo a tiempo para el Año Nuevo Chino. La llegada a Qingtian fue todo un acontecimiento con familiares, vecinos y medios locales: la recibieron con pancartas y entrevistas. Pero también supuso un momento de introspección: «Hay muchas cosas que procesar después de algo así. La meditación me ayudó mucho a asimilarlo».

En agosto Sara ha recalado en Galicia para participar en el Gulliver, donde ofreció una charla que tuvo «muy buena acogida», agradece, entre un público curioso por su historia. Era su primera vez en Ferrolterra así que no dudó en quedarse varios días en la zona para conocer lo que ofrece la comarca. Tuvo tiempo de recorrer rápidamente A Coruña y conocer algo más Ferrol y la costa de Covas y playas como Esmelle o San Xurxo. Se hospedó de forma altruísta en la vivienda de la fotógrafa Gala Santalla. «Es un entorno precioso, bien cuidado, sin grandes construcciones que rompan el paisaje. No tenéis nada que envidiar a otros sitios», comenta.

Impacto social

Ahora, instalada temporalmente entre Madrid y Barcelona mientras busca un trabajo con «más impacto social», sigue dando charlas y compartiendo su mensaje: viajar sola no es sinónimo de peligro, sino una oportunidad para descubrir que hay gente buena en casi cualquier lugar. «Hubo un par de situaciones incómodas, pero el 99 % de mis experiencias han sido muy positivas. Quiero romper prejuicios y demostrar que se puede».