Steffany's Bag, los bolsos de factura ferrolana que traspasan fronteras: «No me esperaba que tuviesen tanto éxito»

B. ANTÓN FERROL / LA VOZ

FERROL CIUDAD

Fanny Vázquez, retratada con algunas de sus creaciones en la calle María de Ferrol
Fanny Vázquez, retratada con algunas de sus creaciones en la calle María de Ferrol KIKO DELGADO

Fanny Vázquez triunfa con diseños propios y réplicas de modelos icónicos como el Kelly o el Birkin, hechos cien por cien a mano con cuero de Italia, Ubrique y Galicia

24 may 2024 . Actualizado a las 09:41 h.

Fanny Vázquez (Ferrol, 53 años) se considera una mujer «inquieta» y no hay más que hacer un recorrido por su trayectoria profesional para comprobar que el adjetivo le va como anillo al dedo. Estudió Magisterio y Psicopedagogía, trabajó como maestra, también en el sector inmobiliario, montó una empresa de seguridad y reformas.. Y finalmente encontró su vocación en la artesanía del cuero, en la que creció de forma autodidacta y fructificó hace ahora un año con la creación de su propia marca, Steffany's Bag, con la que triunfa gracias a una fórmula infalible: «Son bolsos de cuero cien por cien artesanales, en los que absolutamente todo está hecho a mano, desde el corte hasta el tintado y el cosido, y además son muy femeninos», anota la artesana, que vende sus creaciones en la zapatería Miguel de la calle María, donde también trabaja reparando y «tuneando» este tipo de artículos. «Él me animó y me ayudó a poner en marcha este proyecto, fue quien eligió el nombre de la marca y también diseñó el logo», comenta con agradecimiento hacia el dueño de la zapatería, Miguel Pérez.

Fanny fabrica los bolsos de su firma a mano con cuero de curtidores de Italia, Ubrique y Carballo
Fanny fabrica los bolsos de su firma a mano con cuero de curtidores de Italia, Ubrique y Carballo KIKO DELGADO

Su aventura emprendedora comenzó hace poco menos de un año. «Me hice un bolso para mí y lo colgué en el Instagram de la zapatería para ver la reacción de la gente. La respuesta fue increíble. Empezaron a llegar muchísimos mensajes y de sitios tan lejanos como Colombia, Nueva York o Suiza. La gente preguntaba cuántos costaban y tuvimos que retirar la publicación porque fue algo que nos desbordó», rememora Fanny.

Pero esa «prueba del algodón» le sirvió para comprobar que su producto despertaba interés y tenía buena aceptación. Y fue así como la artesana se lanzó a la venta de sus creaciones, «pero a muy pequeña escala, porque yo sola no doy abasto». «Solo hago diez unidades de cada modelo, porque me gustan que sean exclusivo y porque si no creo que me aburriría. Me gusta mucho variar y buscar nuevas idea para los diseños», explica la artesana, que elabora sus bolsos con cuero procedente de curtidores de Italia, Ubrique y Tarambollo (Carballo).

 
 
 
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Entre sus «best sellers» se encuentran bolsos que son réplicas de modelos icónicos como el Kelly y el Birkin de Hermès o la Tote Bag de Marc Jacobs, pero también diseños propios como el Cube, el Circle o el Moon. «La verdad es que no me esperaba que tuviesen tanto éxito; entre la clientela hay mucha gente de Ferrol, pero también turistas que visitan la ciudad y se los llevan de vuelta con ellos a París, Nueva York, Italia, Roma, San Petersburgo... A los extranjeros les parecen muy baratos y me dicen que en sus países costarían más del doble o el triple», explica Fanny, que vende sus creaciones a precios que oscilan entre los 165 y los 280 euros.

Cuenta que a sus clientas les gusta que los bolsos no lleven forro, «para que se vea que son de cuero de verdad», y aprecian además que los cierres sean de latón, «porque no rompen». Además de bolsos, Fanny también fabrica en cuero agendas personalizadas, fundas de móviles o correas de reloj. Y como su mente no para ni un minuto, ahora está cavilando en la posibilidad de ampliar la oferta de Steffany's Bag con zapatos y sandalias de cuero hechas a mano, como a ella le gustan. Ya avisó al principio de que era muy inquieta. «¿Quién sabe? A lo mejor dentro de unos años me da por los fogones y me jubilo como cocinera», dice entre risas antes de la despedida.