Honor y gloria a los Díaz Corral de Narón: quien salva una vida, salva el mundo entero

Patricia Hermida Torrente
Patricia Hermida NARÓN / LA VOZ

NARÓN

Benigna Cores Díaz y Siro López destapan la placa, ante la alcaldesa Marián Ferreiro.
Benigna Cores Díaz y Siro López destapan la placa, ante la alcaldesa Marián Ferreiro. JOSE PARDO

Emoción entre la nieta de la casa refugio y Siro López, hijo de un represaliado rescatado por esa familia

07 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras cada guerra, quedan los vencedores, los vencidos y los que toman partido. Verde y pequeñita, la casa refugio de Narón esconde demasiada grandeza. Allí la familia Díaz Corral alojó a numerosos represaliados por el franquismo en la comarca entre 1936 y 1954 para librarlos de una muerte segura. Entre ellos estaba el padre del escritor y humorista gráfico Siro López, impulsor del homenaje que por fin rindió ayer honor y gloria para los Díaz Corral.

Con la organización de Memoria Histórica Democrática y Concello de Narón, en el acto se descubrió una placa conmemorativa. Y también sirvió para que Siro se reencontrase con Benigna Cores, nieta de los homenajeados Rudesindo Díaz y Benigna Corral. Ella también padeció la represión: «Recordo ao meu tío Sindito cun amor moi grande, queríanos a todos e era moi bo, foi asasinado (pola Garda Civil) en 1954». Los padres de Benigna, Binucha Díaz y José Manuel Cores, estarían en la cárcel 17 días, «o meu pai entrou co pelo completamente negro e ao saír tíñao canoso, e a miña nai quedou cun tic nervoso».

Participantes en el acto celebrado en el parque do Cadaval, en Narón
Participantes en el acto celebrado en el parque do Cadaval, en Narón JOSE PARDO

Para Siro López, «foron heroes morais». Fernando Ocampo, de Memoria Histórica, celebró «a solidariedade dos que contribuíron a unha sociedade mellor». Según la alcaldesa Marián Ferreiro, «non repararon en sacrificios para refuxiar aos perseguidos». O como dice la Medalla de los Justos, «quien salva una vida, salva el mundo entero».