El tiempo inestable dejó sin clase a varias decenas de alumnos de la comarca
08 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Las carreteras fueron, como ocurre siempre, las principales afectadas de la nevada que se inició en la madrugada de ayer. Sobre todo se notó en la comarca del Eume, pero también en el Ortegal. Un sentido de la autovía AG-64, de los kilómetros 43 al 26 en dirección a Ferrol, estuvo cortada entre las 8.10 hasta las 9.20 horas, según informó la Dirección General de Tráfico. Además, durante algo más de tiempo estuvo restringida a los camiones, que formaron una larga fila. Por otro lado, se vieron especialmente perjudicados 13 kilómetros de la AC-101 (As Pontes-Ortigueira), sobre todo al paso por O Caxado, y la AC-564, entre Cabanas y el municipio pontés, principalmente en las zonas de As Neves y Goente, con intensas nevadas.
Más allá de los cortes, se registraron un buen número de incidencias en la carretera, que se produjeron en As Pontes, San Sadurniño, As Somozas, A Capela y Ortigueira, tal y como informó el 112. En la AC-564 fue auxiliado un camión que quedó cruzado, debido a las placas de hielo, así como en A Pena de Eiriz. Mientas, multitud de vehículos quedaron atrapados en las salidas secundarias y tuvieron que esperar para salir o ser retirados.
Por otro lado, la nieve dejó sin clase a varias decenas de alumnos de la comarca, al suspenderse el servicio de transporte escolar por el mal estado de las carreteras. El CEIP Plurilingüe Virxe da Cela, de Monfero, no abrió las puertas y los 137 estudiantes tuvieron que quedarse en sus casas. Al CEIP Mosteiro de Caaveiro, de A Capela, solo acudieron 21 de los 68 colegiales, puesto que ninguna de las tres rutas de autobús operó durante la jornada de ayer. En el CEIP A Magdalena, en As Pontes, se vivió una mañana bastante complicada. El 20 % de los niños, los que utilizan los autocares, no pudieron desplazarse hasta el centro y la mitad de los profesores tampoco. Los docentes que residen en Lugo, Guitiriz, Viveiro o Cariño y que tenían que circular por la AG-64 o por la carretera AC-101 no lograron llegar a su destino. En el CEIP Francisco López Estrada, en O Barqueiro (Mañón), también se ausentó un enseñante, al encontrarse con el vial de O Caxado cortado al tráfico.
Sensación térmica bajo cero
Si las temperaturas rondaron los cero grados en casi todas las zonas del interior de las comarcas de Ferrolterra, Eume y Ortegal durante la mañana de ayer, la sensación térmica cayó hasta los ocho puntos bajo cero en Monfero, según registró la estación de MeteoGalicia, ubicada en el Monte da Curra, y los cinco en la sierra de A Faladoira, en Ortigueira. El viento, de entre 50 y 81 kilómetros por hora (la racha más fuerte se produjo en Punta Candieira, en Cedeira), agudizó la percepción de frío en la costa.
Los camioneros sufrieron la nieve: «No la quiero ver ni en pintura»
Si hubo un sector afectado durante la jornada de ayer, fue el de todos aquellos que pasan gran parte del tiempo en la carretera, principalmente los camioneros, a los que primero se les restringe el tráfico en este tipo de nevadas. Así ocurrió en la autopista, donde se pudo ver una fila eterna de luces en un costado a primera hora de la mañana.
En la zona de Goente, enfrente a Casa Díaz, un transportista del carbón dudaba si salir o no a la carretera, pero el tener que cruzar la parte central, la que queda sin limpiar, acabó echándolo para atrás. «Moitos dos meus compañeiros están circulando, pero que prefiro non arriscar. Desde que empezou a caer pola mañá, púxose todo perdido», comentaba. Y eso que los quitanieves se afanaron durante varias horas en retirar la nieve, pero incluso cerca del mediodía hubo momentos en los que parecía una ventisca de alta montaña. También trabajaron los tractores con pala del Concello, sobre todo para llegar a los lugares más alejados. No obstante, no hubo que lamentar ninguna incidencia grave.
Algún camionero echó de menos, eso sí, más avisos de Tráfico. En la subida al monte Caxado, una pequeña señal aconsejaba del uso de cadenas, pero nada más. De hecho, varios coches subieron hasta el parque eólico, e incluso algún camión, aunque en este caso con menos suerte. Un transportista que venía con alpacas de paja desde León, en dirección a Grañas do Sor, se quedó parado en la subida al punto más alto de la zona. Puso los intermitentes y se quedó esperando alguna ayuda. «Soy de Castilla y León y algo de nieve vi -indicó irónicamente-, pero no la quiero ver ni en pintura», expresó. Y es que, por muy bonita que sea, para los conductores es un quebradero de cabeza y, además, la mayoría de los de la zona no tienen en experiencia en terrenos con estas condiciones.
La nieve continuó hasta pasado el mediodía, cuando empezó a convertirse en aguanieve. A esa hora todavía era visible el manto blanco en los costados de la autovía y por las vías secundarias de gran parte de la comarca del Eume. Las bajas temperaturas continuarán en los próximos días.
Documentación | Un tiempo habitual por estas fechas en las mismas zonas
La nieve en As Pontes no es algo extraño y, de hecho, en la zona de O Caxado deja un manto blanco al menos una vez cada año. Sin embargo, la nevada de ayer fue mucho más intensa que otras ocasiones. En febrero del 2015 también se cortó la autopista y las máquinas quitanieves trabajaron a destajo en las vías que habitualmente están afectadas. Mientras, en el 2010, el mal tiempo se adelantó a los primeros días de diciembre, algo que no suele ocurrir.
Una muy recordada por los vecinos es la ocurrida en febrero de 1983, cuando As Pontes incluso solicitó ser declarado zona catastrófica. Entonces se hundieron los tejados de algunas naves industriales, y en granjas de O Deveso y O Freixo murieron animales a causa del frío. Además, numerosos aficionados al deporte de esquí de la comarca de Ferrol acudieron a las zonas altas de A Capela.