Una pareja usó a un menor de 13 años para robar en casas de la comarca de Ferrol
ORTIGUEIRA
Los acusados reconocieron parte de unos hechos acaecidos en pandemia en Ortigueira y Cerdido
26 oct 2023 . Actualizado a las 22:52 h.El fiscal pedía penas importantes de cárcel para una pareja por robar en dos casas de Ortigueira y una de Cerdido usando a un menor de 13 años, al que azuzaban para que se adentrase en las viviendas. En la causa también se les acusa de realizar transacciones con objetos que sabían que eran robados. De hecho, la condena que les imponen es, precisamente, por un delito de receptación. El juicio no se llegó a celebrar porque el abogado de la defensa logró una conformidad en la que los acusados asumen su culpa por unos hechos que tuvieron lugar mientras estaba en vigor el estado de alarma motivado por la pandemia.
El escrito del fiscal detalla que la pareja acudió a una vivienda de una aldea ortegana «llevando consigo al hijo de unos vecinos suyos (que cuenta en la actualidad 16 años y en ese momento 13), los dos acusados, puestos de común acuerdo e inspirados por el ánimo de enriquecerse de manera ilegítima, utilizaron al menor para llevar a cabo el apoderamiento de varios objetos que se hallaban en el referido inmueble». En principio, el joven iba a declarar por videoconferencia para contar su versión de los hechos, pero finalmente no fue necesario al aceptar los dos acusados un acuerdo.
Para acceder a una de las viviendas en las que robaron en Ortigueira destrozaron una chapa metálica que cubría la entrada situada en la parte trasera de la vivienda y quebrantaron la cerradura de la puerta del garaje. «Una vez dentro, los acusados y el menor, quien seguía las instrucciones que le daban los encausados se apoderaron de un deshumidificador de la marca LG modelo Dry Master valorado pericialmente en 35 euros, así como una sierra radial de la marca Proplus modelo, valorada por perito en 40 euros». La propietaria de la casa recuperó los objetos, pero no el importe de los daños en la vivienda, que valoró en poco más de 90 euros.
Este no fue el único robo. Los agentes que llevaron el caso aseguran que «entre los días 11 y 13 de mayo de 2020, cuando estaba en vigor el estado de alarma, la acusada acudió en compañía del menor a otra casa de A Barqueira en Cerdido» para otro robo en el que volvió a usar al menor. En este caso se hicieron con varios objetos que se hallaban en el interior de un invernadero anexo al inmueble; el adolescente se llevó una emisora de radiofrecuencia de la marca President Grant, una motosierra de la marca Toucan, varios tomates y pimientos, un apero de labranza, una bombona de gas butano, una manguera de diez metros de largo y una cuerda con collar para perros; tales bienes tenían un valor que ha sido fijado pericialmente en 325 euros, así como dos sillas de playa. La propietaria pudo recuperar solamente la manguera y las dos sillas de playa. Además tuvo unos desperfectos que han sido valorados por perito en 127 euros. No obstante, la víctima de este robo ha renunciado a reclamar una indemnización.
Afectados que no reclamaron
La pareja perpetró más golpes: otro fue en una casa de Ortigueira, donde el menor se llevó un cierre que se hallaba frente a la fachada del inmueble, compuesto por varias estacas y una cuerda gruesa, y cuyo valor no ha sido determinado. Los daños de esta acción se han valorado en 151 euros. No obstante, el propietario, que recuperó el referido cierre, también ha renunciado a reclamar. Algo que es cada vez más frecuente entre persona que bien prefieren pasar página y no regresar más al juzgado.
El fiscal consideraba que la pareja era culpable de varios delitos de robo con fuerza y hurto continuado, agravado por emplear a un menor de 16 años.
La pena
Los acusados llegaron a un acuerdo de conformidad gracias al que aceptaron ser condenados a un año y medio de cárcel por declararse culpables de cometer un delito de receptación. No se les impuso responsabilidad civil. La pena queda suspendida por un plazo de dos años, aunque con la condición de que durante ese período no delincan. Sin embargo, el fiscal solicitaba diferentes penas de cárcel, que sumaban los cinco años para cada uno de los encausados, así como diferentes indemnizaciones a cada uno de los afectados por los robos. En el caso pesó la calificación alternativa y subsidiaria para cada uno de los acusados, que se declararon responsables simplemente de un delito de receptación.