
La retirada de una barrera antifuel dañó el desagüe natural; desde entonces no se ha logrado un sistema no agresivo
28 oct 2024 . Actualizado a las 17:47 h.«Creemos que ha fallado el protocolo, que no debe ser algo cerrado, sino que tiene que ser dinámico como la propia laguna», reclama el alcalde de Valdoviño, Alberto Fernández. El vaivén que ha sufrido la laguna de A Frouxeira en la última semana con el inicio de las actuaciones de apertura artificial que contempla el protocolo, desbordamiento y anegamiento de las zonas anexas, y, por último, cierre de ese canal de desagüe, ha desatado una nueva oleada de críticas de los vecinos afectados.
¿Desde cuándo ocurre?
El desastre natural del petrolero Prestige causó un antes y un después en el devenir de la laguna En el año 2003 las excavadoras retiraron la barrera anticontaminante colocada un año antes para evitar la entrada del fuel, pero a la vez dañaron el desagüe modificando alteraciones en el vaciado natural.
¿Qué decisiones se tomaron después?
La laguna fue objeto de medidas contradictorias. En el 2008 la Xunta instaló una barrera de piedras que provocó que, meses después, al tener que volver a abrirse la laguna, la fuerza con la que salió el agua derribase una duna. En el 2009 llegó a estar seca durante un mes al abrirse de nuevo tras las inundaciones de inverno. En esta ocasión salió más agua de la prevista. Y en las Navidades del año 2011 se produjo de nuevo el desbordamiento de la laguna e inundación del entorno, una gota que colmó el vaso y acabó con los vecinos encerrados en el consistorio. Semanas después, se abrió de forma precipitada cuando la Xunta procedía a realizar el canal por la playa. El Gobierno autonómico inició entonces estudios para buscar mecanismos no agresivos que permitiesen regular el nivel hídrico al considerar que el vaciado artificial podía estar dañando el enclave. Un proceso que se alargó hasta el 2015 cuando entró en vigor el plan de conservación de la laguna y el protocolo actual que regula cualquier actuación que se acometa en ella.
¿Qué ha ocurrido esta semana?
Aunque Medio Ambiente anunció la apertura del canal al llegar la cota de agua al nivel que recoge el protocolo, el temporal de mar agravó la situación hasta provocar una nueva inundación. Pero, un segundo temporal generó el efecto contrario, vaciando más rápido de lo normal el agua. Por ello se recurrió a la medida inversa, la construcción de ataguías, unos diques de arena para ralentizar el vaciado, que esta vez se han cerrado totalmente con sacos de arena. «No es habitual que se alcance el nivel mínimo, pero no es excepcional ya que está contemplado en el protocolo, que se ha cumplido estrictamente», recalcaron desde la Consellería de Medio Ambiente. Ante la inquietud del gobierno local y los vecinos de la zona, el departamento autonómico ha convocado a los agentes implicados en una reunión para valorar la situación, las medidas tomadas y este plan de actuación.