El grupo llega mañana a Galicia con su gira «Suspended in Time»
16 ene 2012 . Actualizado a las 15:39 h.El Corella Ballet es la única compañía española dedicada a la danza clásica, especialidad artística en la que su director, Ángel Corella, ha llegado a la cúspide mundial. Desde mañana martes hasta el 24 de enero, esta compañía visitará A Coruña, Vigo y Pontevedra con un espectáculo denominado Suspended in Time.
-¿Cómo es este espectáculo?
-Hemos realizado una selección con las mejores piezas interpretadas por la compañía en los últimos años. Queremos que la gente se ponga en situación desde el primer momento y que reconozca que está viendo una compañía internacional de danza clásica, por eso empezamos con Raimonda, un ballet del repertorio clásico. Continuamos con For 4, una pieza muy extraña porque es para cuatro hombres. Después, Soleá, un paso a dos de fusión flamenca con clásico, creado por María Pagés. Y concluimos con Suspended in Time, que tiene música de ELO. Es un repertorio variado que satisface al público entendido y al que no lo es tanto.
-¿Le atrae la coreografía?
-No me considero coreógrafo, para serlo hay que nacer, aunque he hecho algunas piezas, casi siempre con bastante éxito. Además, quiero que el público y mis bailarines puedan disfrutar con los grandes coreógrafos que hay en el mundo. De vez en cuando puedo aportar algo, pero no voy a sofocar a los bailarines ni al público solo con coreografías mías. Nuestra compañía está pensada así. Hay otras en España en las que sus directores también son coreógrafos y son famosas por ellos, en vez de serlo por los bailarines. Yo quiero que sea todo lo contrario.
-¿No es heroico tener una compañía clásica en España?
-Es quijotesco tener una compañía de danza clásica en España. Es incomprensible por qué es tan difícil tener una sola compañía en España cuando hay más de 50 orquestas, cientos de museos, etcétera. Para hacer una compañía clásica se necesita conocer ese mundo y tener conexiones con coreógrafos para poder traer estos ballets, y eso no puede hacerlo cualquiera. Gracias a Dios, nosotros estamos teniendo muchísimo éxito por el repertorio y los bailarines. Tenemos bailarines que fueron principales en el Nacional de Cuba, en el American Ballet, etcétera, y vinieron aquí.
-Alguien dijo que el ballet clásico es la base de toda la danza. ¿Está de acuerdo?
-Claro, por supuesto, de todas las danzas. Cuando uno controla la danza clásica puede controlar cualquier danza. Ese también es un problema por el cual las compañías de clásica no han funcionado bien, porque a veces se han hecho sin la calidad suficiente. Hacer clásico muy bien es prácticamente una heroicidad porque cuando te caes en una coreografía de contemporáneo lo puedes arreglar rodando por el suelo, o haciendo como que era parte de la coreografía, pero cuando es clásico y tienes que hacer un giro y un salto y caes, es obvio que te has caído.
-¿Por qué son más populares en España los bailarines que las bailarinas?
-Casi siempre los directores de las compañías han sido hombres, pero hay bailarinas muy populares, como mi hermana, Carmen Corella, Lucía Lacarra o Tamara Rojo. Hay muchas bailarinas con nombre pero al no haber sido directoras no son tan conocidas aquí. Pero, lo realmente importante es que ahora tengan oportunidad en España de darse a conocer por lo que están haciendo en su propio país.
-Uno de los objetivos de la Fundación Ángel Corella era crear una residencia escuela. ¿Cómo está ese proyecto?
-Uno de los puntos más importantes de nuestro proyecto es la formación y creación de los bailarines del futuro. La escuela residencia se instalará en Figueras y será para niños desde los 11 a los 18 años. Allí podrán aprender todo lo que conlleva el mundo de la danza, además de los estudios generales, música, escenografía, maquillaje de escena, etcétera. Queremos que, si por mala suerte se lesionan y quieren seguir vinculados al mundo de la danza, tengan formación.
-¿Qué le ha dado a usted la danza?
-Todo. Me ha dado la vida. Aunque hablo mucho, a mí me resulta más complicado expresar mis sentimientos por medio de palabras que por medio de la danza. La danza es una forma de vida, una forma de expresión y comunicación entre los seres humanos. Es, además, una comunicación muy directa porque a través de la danza no se puede mentir. Uno puede decir con palabras algo que realmente no siente y, si se le da bien mentir, puede llegar incluso a creérselo. Sin embargo, con la danza esto es imposible.
-¿Está bien encaminada la Compañía Nacional de Danza?
-Le han dado la nueva dirección a José Carlos Martínez, un chico con muchísimo talento que ha sido muy buen bailarín en la Ópera de París, y casi todo el mundo pensaba que podía transformarla en una compañía de danza clásica. A mí eso me extrañaba mucho porque son bailarines que llevan bailando descalzos muchos años y, claro, ponerlos en zapatillas de puntas y hacerles bailar algo que llevan sin bailar veintitantos años me parecía prácticamente imposible. Y efectivamente, nada más entrar, dijo que le era imposible y que no iba a hacer nada de clásico, que iba a seguir con la línea anterior. Lo bueno para nosotros es que seguimos siendo la única compañía de danza clásica y de nivel, lo malo para el resto de los españoles y de los bailarines de danza clásica que se quieran dedicar a ese mundo es que no podrán hacerlo. No ha habido cambio, es lo que había.
ángel corella bailarín
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