Una técnica pionera permitirá endezar un edificio de Ponteceso

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

FIRMAS

El inmueble, de mil toneladas de peso, será levantado 25 centímetros

22 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

No es el proceso para levantar el Costa Concordia, pero casi. Una empresa llevará a cabo un proceso pionero en España para aplomar un edificio de cinco plantas situado en la avenida Eduardo Pondal de Ponteceso. Esta operación, que la compañía Enmacosa lleva meses preparando y que ejecutará la constructora Desarrolla, se llevará a cabo con toda probabilidad el próximo viernes. Se trata del inmueble desalojado en su día debido a las numerosas grietas que presentaba al ser levantado en pleno humedal de Ponteceso.

El proceso, según la dirección de obra, es «aparentemente sencillo pero espectacular», donde prima, y mucho, la precisión. La actuación consiste en cortar los pilares de la planta baja del inmueble -de mil toneladas de peso y cinco pisos de altura-, izarlo al peso mediante una serie de gatos hidráulicos colocados en la base, enderezarlo y asentarlo antes de revestir los huecos de los cimientos.

Esto es la teoría. Pero en la práctica supone la ardua tarea de equilibrar un edificio que ha sufrido un desplome lateral hacia su fachada principal de 40 centímetros respecto a la línea imaginaria vertical, que derivó en una inclinación del inmueble del 2,7 %. Es decir, 1,35 grados sobre la verticalidad.

Antes de dar el visto bueno a esta técnica pionera, los técnicos efectuaron un simulacro en 3D tomando como referencia la actual situación del edificio, los daños estructurales que presenta y el grado de deformación actual mediante una tecnológica láser de última generación. El proyecto de izado, redactado por el estudio F.?V.?A. Arquitectos, en colaboración con Enmacosa, llevan cuatro años buscando la fórmula para tratar de recuperar un edificio que tuvo que ser desalojado hace ahora cuatro años por las enormes grietas sufridas como consecuencia del hundimiento de una parte de los cimientos.

Abril

Las obras para recuperar este inmueble comenzaron en la primera semana de abril, con la colocación sobre los pilares de la planta baja de un entramado metálico que guiará el movimiento en bloque de todo el inmueble, además de la instalación de unos postes que permitieron colocar 26 gatos hidráulicos con capacidad cada uno de soportar un peso de cien toneladas. Los 15 pilares fueron cortados a la altura de la base para proceder este lunes al izado del edificio hasta un máximo de 25 centímetros en la parte más hundida de la edificación. Toda una obra de ingeniería en la que nada ha quedado al azar.

Está en un humedal, tiene grietas y sufre una inclinación del 2,7 %