«Midnights», las claves de uno de los discos más esperados del año

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MARK BLINCH | REUTERS

Taylor Swift mira al futuro mezclando su pop electrónico de la década pasada con el toque indie de sus últimos movimientos

29 oct 2022 . Actualizado a las 18:33 h.

Ahora que Taylor Swift ya pertenece al elenco de los artistas a tener en cuenta por la crítica desde la notable dupla indie-folk de Folklore (2020) y Evermore (2020), editados en plena pandemia —craso error de adanismo, porque la artista ya brillaba con anterioridad en joyas como 1989 (2014)—, la salida de Midnights se ha convertido en uno de los lanzamientos de la temporada. Disco lanzado del tirón sin temas de adelanto en la misma medianoche que lo titula, supone un nuevo escalón evolutivo para una artista que arrancó siendo una suerte de estrella country-pop y ha terminado convertida en un icono hipster tardío. En este álbum —décimo ya de su carrera— recopila piezas creadas cuando la ciudad duerme y los poetas buscan la inspiración en la oscuridad. Todas ellas están cortadas por un pop electrónico de baja intensidad, que podría sugerir un cruce entre lo que ofrecía en álbumes como el citado 1989 y Lover (2019) y el doblete indie antes mentado.

Sin la pirotecnia multicolor de otros tiempos y en una onda que podría conectar con artistas como Billie Eilish o Lorde, lo cierto es que Taylor Swift lanza una línea hacia su pasado para crear el presente. Y, en ese sentido, se debe citar uno de sus mayores diamantes de aquel momento en el que lo normal era verla como un producto prefabricado sin contenido: la canción Blank Space. Es muestra de pop pluscuamperfecto con plaza fija en la recopilación definitiva del pop del siglo XXI planea como un fantasma en piezas de estas nueva entrega como la maravillosa Anti-hero y Maroom, con esos estribillos fantásticos comandados por su voz de cristal. Otras como Snow On The Beach (cantada con Lana del Rey) o You're On Your Own, Kid hacen viajar al álbum Red (2012). Eso sí, siempre desde esta estética nueva —nocturna, sintética y sutil— en la que incluso se cuela algún coqueteo con el r&b.