Madrid reabre el conflicto con Londres al cerrar 13 horas la verja de Gibraltar

La Voz LA VOZ | REDACCIÓN

GALICIA

Sanidad justificó la medida como una precaución ante la llegada del crucero «Aurora» con una epidemia abordo La Comisión Europea respalda la decisión del Gobierno español.

03 nov 2003 . Actualizado a las 06:00 h.

El Gobierno español ordenó ayer el cierre de la frontera del Peñón al atracar en Gibraltar el buque británico Aurora , en el que viajan más de medio millar de pasajeros que han sufrido en los últimos 13 días un virus estomacal contagioso llamado norwalk. Las autoridades sanitarias alegaron que se trata de una medida «excepcional y preventiva», ya que no habían recibido «la información precisa sobre la enfermedad hasta el día de hoy». Por ello, la ministra de Sanidad estimó que «no se podía actuar de otra manera sin tener una información sólida y contrastada». La frontera permaneció cerrada todo el día, hasta que dos horas después de que zarpara el barco rumbo a Southampton, a las ocho y diez de la tarde, las autoridades, ya con los informes sanitarios del Gobierno británico en la en la mano, ordenaron su reapertura. A lo largo del día, varios centenares de personas permanecieron a la espera de poder cruzar. Irritación en Londres La clausura de la verja trascendió el ámbito sanitario y dio lugar a un incidente diplomático que despertó la irritación del titular de Exteriores del Reino Unido, Jack Straw. El jefe de la diplomacia británica calificó la medida de «innecesaria y desproporcionada». Straw habló por teléfono a mediodía con su homóloga española, Ana Palacio, para pedirle que se reabriera «inmediatamente» la verja de Gibraltar. No lo consiguió, a pesar de que la virulencia del agente infeccioso había remitido. Quince minutos antes de que atracara el crucero Aurora , cuyo pasaje no pudo pisar tierra en varios puertos de Mediterráneo, se cerró la verja que une España con la colonia británica. Eran las 7.30 de la mañana cuando se ejecutó la orden, sin precedentes desde 1985. El Gobierno español informó de la iniciativa a la Comisión Europea, que admitió que se trataba de una medida totalmente lícita, recogida en las leyes comunitarias, aunque el portavoz de Justicia, Pietro Petrucci, destacó que son medidas que traen consecuencias. El ministro principal de la colonia, Peter Caruana, señaló que lo sucedido responde a una motivación política de Madrid. Indicó a la BBC que «el cierre es una reacción que responde más a razones políticas que a la preocupación por la salud pública española. Si España no reclamara la soberanía de Gibraltar esto no hubiera ocurrido».