El «Mar Egeo» emerge dieciocho años después

Ana Lorenzo Fernández
Ana Lorenzo A CORUÑA |

GALICIA

Tres buceadores trabajan en la recuperación de los restos del petrolero que se hundió a los pies de la Torre

31 jul 2010 . Actualizado a las 03:44 h.

El 3 de diciembre de 1992 se acercaba a las costas coruñesas el petrolero griego Mar Egeo , cuyas bodegas estaban llenas con 80.000 toneladas de crudo que iban dirigidas a la refinería de Repsol. Sin embargo, nunca llegaría a su destino, porque una densa niebla y unas rachas de viento de más de cien kilómetros por hora hicieron que variase su rumbo y acabase embarrancando a los pies de la torre de Hércules. Tras partirse en dos y verter su carga, el buque explosionó, originando llamas de 50 metros de altura y una intensa humareda que era visible desde distintos puntos de la comarca.

Tras la recuperación medioambiental de las rías que acusaron el desastre y de que los afectados cobrasen sus indemnizaciones diez años después, solo quedaba un asunto pendiente: retirar el buque del fondo marino. La empresa Desguaces Petrallo fue la encargada de llevar a cabo esta misión, aunque la gran dificultad de ir sacando los distintos pedazos del petrolero ha hecho que su trabajo se alargue durante muchos años, «y los que nos quedan», apuntaba ayer desde esta empresa José María Sánchez.

En los últimos días, tres submarinistas, un patrón, un mecánico y un marinero han intentado recuperar distintos pedazos que han ido sacando del mar. Su trabajo consiste fundamentalmente en que los buceadores enganchan con cuerdas las piezas del buque, y luego una grúa hidráulica las sube a la superficie y las carga en el barco Mimar Cinco , desde donde después se llevan a puerto.

Sin embargo, la tarea no es nada sencilla, porque solo se puede trabajar cuando hay buen tiempo, y los cabos se suelen romper. «Aunque estos días hizo mucho calor, apenas pudimos trabajar porque hacía viento. Y solo nos queda agosto, porque luego solo podremos trabajar un par de días», explicó Sánchez. Asimismo, destacó que hay muchas piezas del petrolero que tienen unas dimensiones tan grandes «que habrá que esperar a que el mar haga su trabajo y las parta para poder sacarlas».