La de ayer fue una de las escasas sesiones de control de la legislatura en las que Feijoo no logró reunir en los escaños azules del Parlamento a todo su Gobierno. Faltaban dos de los pesos pesados: Alfonso Rueda (Presidencia) y Agustín Hernández (Infraestruturas), que se desplazaron a Madrid para asistir a la toma de posesión de Ana Pastor como ministra de Fomento.
Cuando se difundió la noticia ?también faltó a la sesión matinal Beatriz Mato, aunque por cuestiones familiares?, de inmediato empezaron a circular por el pazo de O Hórreo todo tipo de rumores que situaban a Hernández en una Secretaría de Estado de Fomento o incluso al frente del ADIF, el organismo que tendrá que completar las licitaciones del AVE gallego.
Pero nada de eso se produjo, aunque el PPdeG tampoco logró acallar las especulaciones. Es más, en la Xunta casi nadie oculta que Feijoo sigue a la espera de que alguno de los nuevos ministros descuelgue el teléfono para ficharle algún conselleiro y personas como Hernández, el conselleiro de Medio Rural, Samuel Juárez, o la responsable de Mar, Rosa Quintana, son los nombres que más salen en las quinielas.
Aparte de lograr colocar a una gallega al frente de Fomento, en la Xunta albergan alguna esperanza de colocar alguna pieza también en el Ministerio de Agricultura, para llevar los asuntos de pesca. De hecho, los ministros Loyola de Palacio y Arias Cañete ya contaron entre 1996 y el 2002 con Samuel Juárez para este cometido, que podría ser convocado de nuevo si la llamada no la recibe Quintana.