La policía ya sospechaba que el interventor era el que había llamado al móvil

j. m. p. redacción / la voz

GALICIA

02 ago 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La declaración voluntaria ante el juez del maquinista Francisco José Garzón reveló el nombre de la persona que lo había llamado al teléfono móvil minutos antes de que el tren descarrilase en Angrois. Sin embargo, antes de ese momento los agentes de la Policía Nacional ya sospechaban que el interventor era la persona que había llamado por teléfono desde el interior del tren al maquinista, según fuentes de la investigación.

El móvil, desaparecido

Mientras la investigación continúa, nada se sabe del teléfono móvil de empresa con el que el maquinista mantenía la conversación con el interventor. Ese móvil está desaparecido desde el momento del accidente y la policía hace gestiones para localizarlo, aunque el aparato en sí no es relevante para obtener información de las llamadas, que quedan registradas en la operadora.

A 153 por hora

Fuentes próximas a la investigación del siniestro indicaron que uno de los aspectos que parece estar claro es la velocidad a la que descarriló el tren en la curva de A Grandeira, cuando estaba a punto de entrar en Santiago y que ha quedado fijada en 153 kilómetros por hora, como quedó demostrado tras la apertura de las dos cajas negras del tren Alvia, que lleva una en la locomotora delantera y otra en la trasera. Según esos datos, el maquinista accionó el freno y consiguió reducir la velocidad que traía en el tramo anterior, en donde este tipo de trenes circulan a casi 200 kilómetros por hora.

Las cajas negras

El informe de los especialistas del Cuerpo Nacional de Policía sobre el audio recogido en las dos cajas negras del tren Alvia podría llegar a ser determinante, aunque tanto el maquinista como el interventor ya declararon que habían terminado la comunicación segundos antes de que el tren se saliese de la vía. Sin embargo, ya era tarde, y el maquinista no fue capaz de evitar el descarrilamiento del tren Alvia, que había salido a las tres de la tarde de Madrid.