El nombramiento de la gestora provincial cuenta ya con el aval de Ferraz
29 sep 2015 . Actualizado a las 16:47 h.La cuenta atrás para Francisco Caamaño ya se ha iniciado. El PSOE aprovechará el inicio del curso político para resolver la crisis abierta en la provincia de A Coruña el pasado 19 de julio, cuando la mayoría de las agrupaciones aprovecharon la celebración del congresillo para desautorizar a la dirección provincial, dirigida por el exministro de Justicia, tumbando así la lista de delegados que Caamaño tenía perfilada para el congreso extraordinario que entronizó a Pedro Sánchez como secretario general. El propio Pedro Sánchez aprovechó el pasado sábado su visita a Galicia para terciar en la guerra que libran los socialistas coruñeses. Y lo hizo mostrando el «respaldo absoluto de la ejecutiva federal» a las decisiones que en este asunto pueda tomar José Ramón Gómez Besteiro y la dirección del partido en Galicia. Después de que Caamaño acusara a la cúpula del PSdeG, y nominalmente a la secretaria de organización, Pilar Cancela, de promover «un golpe de Estado» contra la ejecutiva provincial coruñesa por respaldar una lista alternativa a la suya, desde la sede gallega de O Pino se ha empezado a explorar la posibilidad de cesar a toda la ejecutiva de Caamaño para nombrar en su lugar una gestora de integración, en la que habría personas experimentadas de las ciudades de A Coruña, Santiago y Ferrol, pero del resto de las comarcas y de los sectores del partido considerados proscritos a los ojos de las ejecutiva provincial. «A xestión de Caamaño está deixando nos ósos ao PSOE na provincia da Coruña, e así é imposible afrontar as municipais», sostiene un miembro de la ejecutiva gallega. Y en la misma tesis abunda la secretaria general de una agrupación: «Lo insólito sería no resolver esto cuando estamos a las puertas de decidir las candidaturas en cada localidad». Pero esta vez, el PSdeG sí parece convencido de que tiene que actuar de inmediato para resolver el desgobierno del partido en la provincia, que pasó de ser su principal feudo político en Galicia a ceder casi todo su poder institucional al PP. La próxima semana está previsto que la dirección gallega retome su actividad, con la celebración de la primera ejecutiva encabezada por Besteiro, que ya habría recibido el visto bueno de Ferraz, donde ahora tiene también asiento, para nombrar una gestora en la provincia de A Coruña que o bien le daría a Francisco Caamaño la oportunidad de presentar su dimisión o sencillamente lo destituiría, al igual que le ocurriría a todo el equipo que lo rodea. Las opiniones están más abiertas a la hora de definir el perfil de la nueva gestora y su período de vigencia. Eso sí, varios dirigentes de las ciudades coinciden en señalar que la número dos del PSdeG, Pilar Cancela, militante a su vez en la agrupación compostelana, sería una buena opción para pilotar la gestora hasta las municipales, pues su elección trasladaría una señal inequívoca del «compromiso» de la dirección gallega con la reconstrucción del partido en la provincia donde más se practicó la política de tierra quemada.