Se niega a declarar contra el acusado de maltratarla 20 años, incluso estando embarazada

Inmaculada Eiroá González
inma eiroá VIVEIRO / LA VOZ

GALICIA

Actos del día de la violencia machista, el pasado 25 de noviembre
Actos del día de la violencia machista, el pasado 25 de noviembre monica ferreiros

Los familiares confirmaron en el juicio los malos tratos

24 mar 2017 . Actualizado a las 11:53 h.

Llevaba veinte años insultando y pegando a su mujer. El último episodio ocurrió en enero pasado, en el domicilio que compartían en una aldea del municipio de Lourenzá. Ella estaba embarazada de ocho semanas y tuvieron que acudir en su auxilio dos de sus tres hijos. Lo dice en su escrito de acusación la Fiscalía. El juicio contra el supuesto agresor, acusado de dos delitos, uno de malos tratos habituales en el ámbito familiar y otro de malos tratos no habituales, quedó ayer visto para sentencia en el Juzgado de lo Penal número 1 de Lugo. La vista se celebró a pesar de que la mujer retiró formalmente la denuncia contra su supuesto agresor, acogiéndose a su derecho a no declarar. Pero sí lo hizo alguno de sus familiares, que corroboró durante la vista las acusaciones formalizadas en la denuncia y la historia de años de supuesta violencia verbal y física.

La Fiscalía, que pide para el acusado dos años y nueve meses de prisión y el pago de una indemnización de 50 euros a la víctima, relata en su escrito de acusación esa guerra doméstica en la que el sujeto, supuestamente, insultaba, gritaba y amenazaba a su pareja. Los episodios se producían casi a diario y en muchas de las ocasiones acababan con golpes, puñetazos, empujones, agarrones, llegando romper muebles y enseres domésticos durante las trifulcas, provocando un clima de angustia difícil de soportar. Episodios que, según la acusación, se produjeron en el domicilio familiar, que desde el 2007 estaba ubicado en distintas viviendas de Lourenzá y en presencia de los hijos menores de la pareja, que presenciaron desde que eran muy niños, los supuestos actos de violencia que su progenitor ejercía sobre su madre.

El último incidente, según la Fiscalía, ocurrió poco después de las cinco de la tarde del 12 de enero de este año, cuando el acusado, en el transcurso de una discusión doméstica, agarró del brazo a la mujer, empujándola y gritándole. Los dos hijos menores, dice el relato de la acusación pública, tuvieron que acudir en ayuda de su madre para separar al acusado y llamaron a la Guardia Civil. Al día siguiente el Juzgado de Instrucción número 2 de Mondoñedo dictó un auto en el que prohibía al supuesto agresor acercarse a la víctima a menos de 200 metros y comunicarse con ella por cualquier medio. Prohibición que volvió a pedir la Fiscalía, por un año y nueve meses, en el juicio de ayer.

Toda la vida juntos

La víctima no ha cumplido aún los 40 años y llevaba al menos dos décadas de relación con su presunto agresor. Tienen tres hijos y un cuarto en camino. Esta era la segunda vez que presentaba denuncia contra su pareja. En la primera ocasión pidió que retiraran la acusación para reanudar la convivencia con el acusado. Ahora la historia se repite.