La subasta de una nave dio pie al inicio de la macrocausa

e. g. s. LUGO / LA VOZ

GALICIA

PRADERO

Jorge Dorribo pasó dos temporadas en prisión a lo largo de los años transcurridos desde las primeras detenciones

27 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El caso Campeón, como algunas de las otras grandes investigaciones judiciales contra la corrupción en Galicia, fue pilotado desde Lugo. La jueza Estela San José, actualmente destinada en Andalucía, se encargó de este asunto durante la práctica totalidad de la instrucción. El inicio de la investigación está en un grabación telefónica realizada a raíz de que Jorge Dorribo, el empresario lucense que a partir de una crema para cuidado de pieles (zapatos, cazadoras, etcétera) montó un laboratorio farmacéutico, adquiriese en una subasta una nave en Vilagarcía que había pertenecido al clan de los Charlines. La compra se hizo por medio de la empresa Proitec. De las escuchas y las investigaciones de Vigilancia Aduanera ponen de manifiesto presuntos delitos de fraude en subvenciones, contra la hacienda pública, tráfico de influencias, falsedad en documento mercantil y blanqueo de capitales, entre otros. El nombre de la operación se tomó de la palabra campeón que el empresario utilizaba con frecuencia en sus conversaciones.

A raíz de las investigaciones realizadas, el 24 de mayo se produjo la detención de quince personas por un presunto fraude en subvenciones públicas, entre ellas Jorge Dorribo, que pasó dos temporadas en prisión a lo largo de los años transcurridos desde entonces, unos tres meses en cada ocasión. En sus declaraciones salpicó a conocidos políticos, como el alcalde Orozco y el exministro José Blanco, que finalmente quedaron exonerados de toda responsabilidad en este asunto.

Apoyo y críticas

Por el camino se han quedado manifestaciones de apoyo a las juezas que investigaron los casos de corrupción, críticas a la instrucción y a la investigación y sobresaltos a relevantes políticos.

Finalmente, la investigación se cierra con trece imputados. Las penas que pedía la fiscalía eran considerablemente altas, especialmente en el de Jorge Dorribo (20 años de prisión). Pero en las últimas semanas se materializaron las negociaciones de los acusados con el fiscal para llegar a los acuerdos ahora conocidos.