El PSOE rompe el mapa político gallego tras 40 años de hegemonía del PP

Rubén Santamarta Vicente
rubén santamarta REDACCIÓN

GALICIA

Pese a resistir mejor que en el conjunto de España, el PP pierde unos comicios en Galicia por primera vez desde 1979, aunque sirve de muro frente a un Vox que sigue lejos de asentarse en la comunidad

29 abr 2019 . Actualizado a las 15:14 h.

Desde hace 40 años, apostar a que el PP será primera fuerza política en Galicia en cualquier elección (municipales, generales o autonómicas), no tiene mérito alguno. Ganaba siempre... hasta este último domingo de abril del 2019. El PSOE (el PSdeG) ha roto el mapa político gallego, la hegemonía de la derecha, con una victoria además en la única comunidad que gobierna el PP con mayoría absoluta. Los socialistas alcanzan un 32 % de los votos, más de 520.000 apoyos (150.000 votos más sobre el 2016), y 10 diputados a Madrid. Son diez puntos más y cuatro escaños ganados sobre las generales precedentes.

El PSdeG se queda, eso sí, en votos y en porcentaje, lejos de su mejor resultado histórico (en el 2008 obtuvo 750.000 votos y los mismos 10 escaños) en un escenario de elevada fragmentación del voto en Galicia. Y porque enfrente se ha encontrado a un PP que resiste mejor en el noroeste que en el conjunto de España.

El resultado es malo para los populares. Su suelo en unas elecciones, cualquiera que fuera esta, estaba en el 30 %, y fue en unas municipales de 1987. En unas nacionales, no había bajado del 37 %. Ahora está en el 27. Es un golpe, sí, pero lo puede relativizar el PPdeG atendiendo a lo sucedido más allá de Pedrafita: el partido se deja en España la mitad de su apoyos y escaños (de 137 a 65). En Galicia, la merma es menor: cede un 35 % de los respaldos, y cae de 12 a 9 escaños.

 

 

Los populares se dejan un diputado por provincia (salvo en Lugo), y pierden la condición de primera fuerza en A Coruña y Pontevedra. Porque es en las provincias atlánticas donde se ha asentado la victoria socialista. Está por ver cómo afecta todo ello a uno de los grandes referentes del partido, Alberto Núñez Feijoo, que se implicó personalmente en la campaña. Hay tiempo aún para el gran reto del partido a nivel gallego, las autonómicas que tendrán que convocarse como tarde en otoño del 2020

Por el centroderecha, al PP se le abre una vía llamada Ciudadanos, que araña dos diputados en Galicia y el 11 % de los apoyos. Siendo su mejor resultado en Galicia (no tenían ahora representación gallega en el Congreso), es discreto si se mide con el comportamiento de los de Rivera en toda España.

Quien claramente sigue por debajo de las expectativas en Galicia es Vox: se queda en el 5 % y en Galicia cosecha uno de los resultados más pobres en España, solo por delante del País Vasco y Cataluña. Es muy sintomático.

En el otro polo, las mareas. En plural más que nunca, rotas en dos candidaturas (En Común-Unidas Podemos por un lado, y En Marea, por otro), que pierden 100.000 votos juntos, y pasan de 5 a 2 escaños, ambos para los primeros, los del partido vinculado a Pablo Iglesias; son tercera fuerza, empatados con Ciudadanos. Los de Luís Villares, en cambio, son séptimo partido, casi pillados por el Pacma.

Y fuera del Congreso se queda, por tercera legislatura consecutiva, el BNG. Tiene el consuelo de confirmar que el partido sigue en fase de recuperación.