Los otros siniestros que segaron vidas de forma prematura

Aunque la siniestralidad se ha reducido considerablemente, Galicia acumula un reguero de accidentes con múltiples víctimas
El fallecimiento de tres jóvenes el miércoles en la AP-9 ha vuelto a encoger el corazón de una comunidad que sufrió durante años graves tragedias en la carretera.
20-07-2002

A LARACHA. Cuatro jóvenes del municipio coruñés perdían la vida en un punto negro de la AG-55. Tenían entre 21 y 38 años. El quinto ocupante sobrevivió. Era el único que llevaba puesto el cinturón.
08-05-2005

PONTECESO. Dos chicos y dos chicas de Cambre, en Malpica, morían tras una noche de fiesta. Tenían entre 19 y 25 años. El coche se salió de la vía durante un adelantamiento. Todos viajaban sin el cinturón.
17-06-2006

CABANA. Tres jóvenes de 17, 18 y 19 años de Borneiro morían a solo dos kilómetros de casa. Hubo un superviviente. Los bomberos tardaron tres horas en excarcelarlo. El coche quedó empotrado contra un poste de la luz.
22-03-2009

TOQUES. El exceso de velocidad segaba la vida de cuatro chicos de Friol, de entre 25 y 29 años. Habían pasado la noche en Melide. El coche se salió de la vía y chocó contra un pino. El conductor sobrevivió.
03-11-2013

ORDES. Volvían a Oza-Cesuras desde Ordes por una pista. Se salieron de la calzada. Murieron dos de los cinco ocupantes, de 16 y 19 años. Uno de ellos era hermano del conductor, que dio positivo en alcohol.
11-07-2018

CARNOTA. Dos hermanos, de 20 y 14 años, morían al salirse de la vía y chocar a su vez contra otro coche. El hermano mayor llevaba a la pequeña al instituto. Habían salido del restaurante familiar en Caldebarcos.