El fugado Rambo gallego pasaba en una empresa de inserción sus permisos carcelarios
Hace tres semanas que Alfredo Sánchez Chacón tenía que haber regresado a prisión
LUGO / LA VOZ
A mediados del pasado mes de marzo, Alfredo Sánchez Chacón, un preso interno en la cárcel de Monterroso, disfrutaba de uno de sus permisos penitenciarios, que pasaba desde hacía varios meses en una empresa de reinserción. En este último permiso, concedido por Instituciones Penitenciarias, Chacón desapareció sin dejar rastro y no volvió a la prisión cuando debía. El conocido como Rambo gallego, apodo que se le dio tras huir al monte durante años tras asesinar a un joven en una fiesta en Cuntis en 1996, fue condenado por múltiples delitos (asesinato, intento de homicidio, una veintena de robos y otras tantas agresiones) a más de 25 años de prisión. Hoy se cumplen tres semanas desde que la dirección de la cárcel de Monterroso espera su vuelta, que aún no ha ocurrido.