Podemos abre otra brecha en el Gobierno al rechazar que se privatice la torre de Lavacolla
GALICIA
El sindicato de los controladores aéreos niega que la liberalización de este servicio vaya a redundar en una mejora de los aeropuertos
23 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La intención de privatizar la torre de control del aeropuerto de Santiago y otras siete, como ya lo están las de Alvedro y Peinador, ha abierto otra brecha entre los dos socios del Gobierno central. Rafael Mayoral, secretario de Movimientos Sociales de Podemos y diputado, advirtió ayer al Ministerio de Transportes y al propio Gobierno que su formación mostrará toda su oposición a que el modelo privatizador seguido por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en 14 aeropuertos de la red de Aena se vaya a extender ahora a un nuevo grupo de pistas. «Nuestro grupo parlamentario no contempla que se puedan hacer privatizaciones en esta legislatura, pues son medidas propias de otra época y que socavan el concepto de servicio público y suponen una amenaza para el interés general», señaló Mayoral.
Tras reunirse con miembros de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), el diputado de Podemos afirmó que «nos van a encontrar siempre enfrente de una medida así», al tiempo que afeó que la ministra no le haya contestado a una carta de petición de reunión para debatir sobre el proyecto de privatización del control aéreo de Santiago, Palma, Málaga, Gran Canaria, Tenerife norte y sur y Bilbao.
El encuentro que dio pie a que Podemos hiciese evidente la existencia de un nuevo desacuerdo en el seno del Ejecutivo sirvió de marco para que la central sindical negase que una nueva privatización de torres aeroportuarias vaya a redundar en una mejora del tráfico y la ordenación aérea. «Las tasas de nuestros aeropuertos son las más bajas de Europa, y en cuanto a calidad, o sea, la demora en aterrizar, nuestros aeropuertos son los segundos en los que los tiempos medios son más reducidos. Es mentira que sea necesario privatizar», señaló el vicesecretario de USCA, Ángel Bellido.