Una alerta por un enfrentamiento entre dos familias por una cuestión de honor termina con una espectacular persecución policial y cuatro detenidos en Teo
GALICIA
Otras ocho personas fueron identificadas en la operación, en la que intervinieron agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil
30 may 2024 . Actualizado a las 09:39 h.Una espectacular persecución en la que intervinieron nueve coches patrulla del Cuerpo Nacional de Policía atravesó Santiago de norte a sur y concluyó en Calo (Teo) con la detención de cuatro personas y la identificación de otras ocho. Todas ellas iban en los tres coches perseguidos, que huyeron de la policía cuando esta iba a identificarlos en la zona de San Caetano en relación con el enfrentamiento entre dos familias por una cuestión de honor, según fuentes conocedoras del caso. Una de las familias reside en Teo y la otra en Lugo.
La Policía Nacional de Santiago conocía ese conflicto porque, hace unos días, miembros de la familia residente en Lugo se desplazaron a Teo y se produjo una pelea, con balance de algunos lesionados pero sin que hubiese heridos de gravedad. Tampoco se presentó ninguna denuncia a consecuencia de esa reyerta. No obstante, la familia de Teo quedó en alerta ante la posibilidad de que los de Lugo volvieran para ajustar cuentas, en concreto en busca de unos familiares que residen en Santiago, cerca de San Caetano. Es por eso que había tres coches en la calle, con doce personas en el interior, vigilando los alrededores de una vivienda para proteger a los ocupantes de esta.
Las personas que vigilaban en los coches no quisieron dar explicaciones a los agentes que, a última hora de la mañana de ayer, iban a identificarlos, y emprendieron la huida a toda velocidad. Durante la persecución, que también cruzó O Milladoiro (Ames) antes de adentrarse en Teo, llegaron a juntarse nueve coches policiales, y en Calo, donde les dieron alcance, intervino asimismo la Guardia Civil, que conocía todos los antecedentes de enfrentamiento entre ambas familias y compartió información con la comisaría de la Policía Nacional de Santiago, motivo por el cual esta detectó a los tres coches sospechosos en San Caetano.
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Las detenciones de cuatro de los doce fugados se produjeron por presunta conducción temeraria y desobediencia a la autoridad, y los otros ocho quedaron en libertad tras ser identificados. Las fuerzas de seguridad les intervinieron armas blancas, bates de béisbol y palos.