En libertad el coleccionista de Lugo detenido por traficar con piezas religiosas robadas

André Siso Zapata
André S. Zapata LUGO / LA VOZ

GALICIA

Xaime Ramallal

El historiador declaró en el juzgado de Mondoñedo después de tres días en el calabozo de la Comandancia. Se le ha retirado el pasaporte y deberá comparecer mensualmente en sede judicial

16 ago 2024 . Actualizado a las 21:44 h.

El historiador y coleccionista de antigüedades lucense detenido este martes ha quedado en libertad tras declarar en sede judicial. La Guardia Civil lo arrestó tras una larga investigación que los llevó hasta él como presunto receptador de obras de arte eclesiásticas robadas de iglesias de Lugo, especialmente una cruz de plata sustraída en el año 2020 de una parroquia del municipio de A Pastoriza. El hombre declaró ante la jueza y terminó saliendo por su propio pie del juzgado de Mondoñedo.

Como medidas, se le ha impuesto la prohibición de salida del territorio nacional, la retirada del pasaporte y la obligación de comparecer mensualmente en el juzgado. Está investigado por un delito agravado de receptación, sin perjuicio de que a lo largo de la instrucción sea investigado por otros delitos, según confirmó el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG). La Fiscalía no solicitó su ingreso en prisión.

L. L. P., de 67 años, lleva décadas estudiando y escribiendo sobre la historia de la provincia de Lugo. Es un reputado coleccionista de obras de arte y figuras eclesiásticas. Tiene multitud de obras sobre iconografía e historia lucense. Su vivienda, que fue registrada por la Guardia Civil este miércoles, estaba repleta de elementos de arte sacro, cuya procedencia está siendo ya investigada. 

Pasó a disposición judicial a primera hora de este viernes, justo cuando se cumplía el plazo máximo de 72 horas que un investigado puede estar bajo custodia de las autoridades. A partir de los tres días de arresto, debe quedar en libertad o pasar al juzgado. La Guardia Civil apuró al máximo este límite en esta investigación para tratar de recopilar toda la información posible sobre los objetos religiosos hallados en el domicilio del detenido. 

Las pesquisas de los investigadores: podría haber ordenado su robo

La Benemérita mantiene todas las hipótesis abiertas y el caso todavía no está cerrado. Una de las teorías que manejan los agentes es que el coleccionista contase con gente de su confianza que consiguiese para él estas figuras de arte eclesiástico. Está por ver si el método usado era lícito o ilícito. No se descarta que alguien pudiese robar las obras para luego entregárselas a él, que se encargaba de comerciar con ellas en el mercado de las antigüedades.

Por eso, la Guardia Civil no desecha la opción de que se produzcan más detenciones. También se maneja la hipótesis de que las adquiriese sabiendo que eran robadas, para después manipular las escrituras y sacar un gran beneficio.

Por el momento, su trabajo se centra en dar con el origen de las decenas de piezas halladas en el domicilio del historiador, ubicado en el lucense barrio de A Milagrosa, que fue registrado este miércoles. 

L. L. P.  junto a su abogada, saliendo del juzgado de Mondoñedo después de declarar por le presunto robo en una iglesia
L. L. P. junto a su abogada, saliendo del juzgado de Mondoñedo después de declarar por le presunto robo en una iglesia Xaime Ramallal

Cuatro años de investigación

La investigación se inició hace ya cuatro años, cuando desapareció una importante cruz plateada de una iglesia del municipio de A Pastoriza. Un chivatazo alertó hace unas semanas a la Guardia Civil de que un coleccionista de Monforte de Lemos la había adquirido. Al investigar su procedencia, dieron con el historiador lucense, que fue detenido. El Instituto Armado le imputaba delitos contra el patrimonio histórico, receptación y falsedad documental

La cruz hallada en Monforte se trata de una figura con alma de madera, repujada, cebolla redonda, y con el relieve de San Martín en el reverso, con la inscripción del año 1696. Se la atribuye la autoría al reputado orfebre Juan de Lobera. Está tasada en 50.000 euros. La Guardia Civil logró probar que el historiador, según las primeras pesquisas, falsificó los documentos que mostraban el supuesto origen legal de esta y otras piezas. 

Los agentes incautaron decenas de piezas de la casa del coleccionista. Ahora, tratan de encontrar el origen de cada una de ellas y descubrir si fueron robadas o si estaban en su poder de forma legal. Este trabajo llevará un tiempo, ya que la Guardia Civil tirará de expertos en arte sacro para intentar identificar cada objeto. Las fechas estivales no ayudaban a acelerar el proceso, ya que muchos asesores están de vacaciones.

El detenido y su abogada, a la salida del juzgado de Mondoñedo, prefirieron no realizar declaraciones a los medios de comunicación.