Rueda anuncia que adelantará el debate de autonomía a después de Semana Santa
GALICIA
El presidente de la Xunta responde con la celebración del debate tras una sesión de control monográfica sobre sanidad
09 abr 2025 . Actualizado a las 10:54 h.El Parlamento gallego celebrará el debate de política xeral, más conocido como debate de estado de la autonomía, «inmediatamente» después de Semana Santa. Así lo anunció el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, durante la sesión de control de este miércoles, en la que los líderes del BNG y del PSdeG centraron sus preguntas en la situación del sistema sanitario tras la manifestación del domingo convocada por SOS Sanidade Pública. El jefe del Gobierno gallego, tras aportar datos con los que trató de «desmontar os bulos» de la oposición, expresó su intención de convocar «na maior brevidade posible» el debate de autonomía. Previsiblemente, la sesión será a finales de abril.
«Imos falar de sanidade en serio», indicó, añadiendo a ello el futuro industrial de Galicia, el gasto en I+D+i, la cultura y «todo aquilo que interesa aos galegos e galegas». Según Rueda, será la forma de contraponer dos modelos: uno, el del «non a todo», acusando a la oposición de haber instaurado una política de crispación en el Parlamento; y otro, el que él encabeza, centrado en que Galicia «avance» y del que la ciudadanía se siente «orgullosa», aseguró.
El reglamento establece que el debate de política xeral se celebre transcurrido un año desde la investidura del presidente, fecha que se cumple esta semana. En la pasada legislatura solo hubo dos, ambos en otoño y con distintos presidentes, ya que Alfonso Rueda asumió el cargo a mitad de mandato tras la dimisión de Alberto Núñez Feijoo para presidir el Partido Popular. El debate permite a cada partido presentar un máximo de cuarenta propuestas de resolución para, en principio, guiar la acción del Gobierno. En la sesión de 2023, solo 13 iniciativas fueron aprobadas por unanimidad de un total de 120.
«Fábrica de mentiras»
Las preguntas, monográficas sobre sanidad, se acumularon por segundo pleno consecutivo, después de que hace dos semanas se centrasen en el proyecto de Altri. Comenzó el secretario xeral del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, quien acusó a la Xunta de «fabricar mentiras nos despachos» mientras miles de personas «agardan angustiadas por unha proba médica».
Lamentó la «planificación inadecuada» en materia de recursos humanos del Sergas, advirtiendo que Galicia no cuenta con más plazas de formación sanitaria porque no las solicita, y que estas pasaron de un centenar con Mariano Rajoy en el Gobierno a 270 en la actualidad. El líder de los socialistas gallegos recordó la proposición de ley que llevarán al Parlamento gallego para que el tiempo de espera en atención primaria no supere las 48 horas.
La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, mostró una fotografía con el derrumbe de parte del techo en la tercera planta del Hospital Materno Infantil de Ourense como paradigma de la «política de acoso e derrubo» de la Xunta en materia sanitaria, «única e exclusivamente para beneficiar a sanidade privada a costa dos galegos e galegas». Como hizo en las últimas semanas, puso cifras a esa presunta estrategia: un recorte de 2.000 millones de euros en atención primaria, listas de espera «manipuladas e falsificadas», 11.000 menores sin pediatras y un aumento del gasto en conciertos con la privada.
Rueda negó las acusaciones, tildándolas de «bulos» y «falsedades» que «axudan pouco» al debate. «A miña obriga é desmontar os seus bulos, moitos que coreaban o domingo», comenzó el presidente gallego, antes de desgranar correcciones a la oposición, como el récord de presupuesto en Sanidade este año, el récord de personal contratado en el Sergas, la reducción en los días de espera para consultas con especialistas o el incremento del número de profesionales en salud mental. También comparó con el bipartito, advirtiendo que los conciertos con la privada aumentaron entonces un 48 %, frente al 3 % actual.
Traspaso de competencias
«Temos a mellor sanidade pública da historia», reiteró varias veces Rueda, quien reconoció que aún quedan «moitísimas cousas que correxir e mellorar». El presidente gallego también bromeó con que la oposición considerase «histórica» la manifestación del pasado domingo cuando, según dijo, «histórico» es el encuentro de este mediodía con el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, para transferir a Galicia las competencias sobre el litoral.
Pontón ironizó con que se considere histórico un único traspaso en 16 años, ritmo que, según calculó, permitirá a Galicia desarrollar las competencias contempladas en su Estatuto en ««300 anos»». Besteiro, por su parte, situó la firma como una muestra de «colaboración» por parte del Gobierno central, provocando risas desde los escaños populares y también del propio Rueda, quien le recordó que el Ejecutivo comparó la normativa gallega con una «declaración de independencia» y la recurrió ante el Tribunal Constitucional.
El presidente de la Xunta lamentó el trato de favor que, a su juicio, recibe el soberanismo catalán por parte del Gobierno central, y pidió una relación equilibrada entre administraciones. «Ao independentismo os cartos e en Galicia as pancartas», le reprochó al líder socialista.