La aparición de los cuerpos quemados en Campo Lameiro coincide con la ausencia de una pareja de Moraña, con él condenado por malos tratos

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Ambos permanecen desaparecidos desde hace días, aunque la Guardia Civil todavía no ha podido determinar la identidad de los cadáveres hallados ayer
01 jun 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La aparición de dos cuerpos calcinados en un coche en Campo Lameiro ayer a mediodía coincide con la desaparición de un pareja de Moraña en la que él tendría antecedentes por malos tratos y una sentencia que le obligaría a entrar próximamente en prisión por los mismos hechos con su actual pareja. Ambos permanecen desaparecidos desde hace días, cuando el hombre dejó de acudir al trabajo. Fue desde allí donde se dio la voz de alarma.
La Guardia Civil, sin embargo, aún no ha podido determinar la identidad de los fallecidos. Después de analizar los restos y decretar la jueza el levantamiento de los cadáveres, sobre las cinco de la tarde se trasladaron los cuerpos para su examen forense, que se realizará para determinar la secuencia de los hechos.
Los cuerpos aparecieron a escasos metros de un núcleo con seis casas, a menos de cien metros de la última habitada, en una zona forestal de Campo Lameiro, y nadie notó nada. Ni humos, ni olores ni siquiera a los perros de la zona ladrando de forma extraña. En la mañana de ayer sábado, unos senderistas descubrieron en una pista forestal, a la que se accede por otra asfaltada, la escena. Un coche calcinado, con dos personas en su interior. Una parcialmente quemada. Un hombre. La otra, totalmente. En tal estado que serán necesarios los estudios de ADN para determinar de quién se trata. Es una mujer, según apuntan los primeros indicios, aunque solo la investigación forense lo determinará con total seguridad.
El coche, un Audi, fue descubierto a mediodía por los senderistas. Hacen la misma ruta todas las semanas y el fin de semana pasado no estaba allí. Otro vecino, que explica a La Voz que utiliza la pista para dar la vuelta con su vehículo y así poder salir mejor por el camino, asegura que el pasado miércoles fue la última vez que hizo la maniobra. Tampoco estaba allí el coche con los cadáveres entonces. Por el estado en el que aparecieron los cuerpos, deberían llevar muertos más de 24 horas.
Las fuentes oficiales mantienen todas las cautelas. Según el subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, el estado de los cuerpos era tan delicado que tendrán que ser las pruebas de ADN las que determinen la identidad de los fallecidos.
Cuando se localizó el vehículo, pasadas las doce del mediodía, se dio rápidamente la voz de alarma. Sobre el terreno se comenzaron a recabar las pruebas forenses inicialmente, para poder proceder a la retirada de los cadáveres. De momento, todas las hipótesis están abiertas, aunque dada la localización, en Caneda, Campo Lameiro, en un paraje apartado del municipio pontevedrés, muy próximo a un área de petroglifos del lugar y muy cerca de un núcleo de viviendas, la hipótesis de un ajuste de cuentas se aleja. Otras opciones, entre ellas la violencia de género, ganan posibilidades, a la espera de la identificación de los fallecidos.
Los vecinos de la zona explican que no se trata de un área transitada, a la que suelan acceder vehículos buscando intimidad o para hacer rutas por el monte. De hecho, para acceder hay que girar justo en el núcleo de viviendas, en un ramal de la carretera principal. Por esta, en ambas direcciones hay zonas forestales aisladas, con pistas sin ninguna vivienda cercana.
Abel Losada ha insistido en mantener todas las hipótesis abiertas. «Ahora es el momento para dejar trabajar a los agentes de la Guardia Civil y no hacer especulaciones que puedan entorpecer la investigación», dijo.
Hasta la zona se acercaron los alcaldes de Campo Lameiro, Carlos Costa, y el de Moraña, Sito Gómez. Ambos coincidieron en calificar el lugar del hallazgo como extraño.
Por la tarde se desplazaron hasta la zona más especialistas de la Guardia Civil para examinar el vehículo y averiguar cómo se produjo el incendio, antes de retirar el coche. Pese a que el fuego consumió por completo el cuerpo de la mujer y parcialmente el del hombre, apenas afectó a los árboles y matorrales que se encuentran a muy escasa distancia de donde se encontró el automóvil.
La jueza, junto con la comitiva judicial y personal especializado de la Guardia Civil, de la Comandancia de Pontevedra, así como el forense, permanecieron sobre el terreno hasta las cinco de la tarde. La zona quedó acordonada.