Monforte acogerá el primer centro específico para menores extranjeros en Galicia

Manuel Varela / Carlos Cortés REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

El edificio lleva el nombre del primer presidente de Prodeme, que dejó en herencia el solar
El edificio lleva el nombre del primer presidente de Prodeme, que dejó en herencia el solar ROI FERNANDEZ

El edificio, que será cedido temporalmente por la entidad social Prodeme, dispondrá de 80 plazas para estos adolescentes

15 sep 2025 . Actualizado a las 13:13 h.

El edificio residencial Francisco Suárez, gestionado por la entidad social Prodeme en Monforte de Lemos, albergará el primer centro específico para menores extranjeros que se abrirá en Galicia. Lo anunció este sábado la conselleira de Política Social e Igualdade, Fabiola García, que recuerda que la medida es una «obriga á Xunta» desde el Gobierno central, que destinará a la comunidad 317 menores migrantes para los que la red de acogimiento autonómica, insiste el Ejecutivo gallego, no tiene ya capacidad. El centro de Monforte será cedido temporalmente por la entidad y dispondrá de 80 plazas, por lo que la Xunta todavía analiza si necesitará nuevas localizaciones para acoger a los 237 jóvenes restantes.

Durante su visita al centro, García estuvo acompañada por el director xeral de Familia, Infancia e Dinamización Demográfica, Jacobo Rey, y por el gerente de Prodeme, Julio Cortiñas. La conselleira agradeció la colaboración de la entidad y lamentó que la decisión del Ejecutivo estatal conlleve la modificación del modelo autonómico de atención a la infancia. «Obriga á Xunta a facer o que non quería, crear centros específicos para menores estranxeiros», afirmó, subrayando que esta medida altera el sistema de protección que Galicia ha venido desarrollando en los últimos años.

La titular de Política Social reiteró que el traslado de estos menores no viene acompañado de financiación por parte del Estado. Según los cálculos del Gobierno gallego, atender a todos los adolescentes implicados podría suponer un coste adicional de hasta 30 millones de euros anuales. Así, insistió en que «estas son as primeiras 80 prazas específicas que a Xunta se ve obrigada a crear», y añadió que el Ejecutivo autonómico sigue buscando nuevas localizaciones, para lo cual ha solicitado la colaboración de otras administraciones.

El número de expedientes de adolescentes que forman parte del grupo de 317 que el Gobierno central pretende trasladar a Galicia asciende ya a seis. A esta cifra se suman los 15 menores extranjeros solicitantes de asilo que, por orden del Tribunal Supremo, deben ser acogidos por el Estado y que, según conoció la Xunta el miércoles, también serán derivados a la comunidad gallega. García reiteró que la Xunta continuará recurriendo este reparto ante los tribunales, como ya ha hecho ante el Tribunal Constitucional junto a otras diez comunidades autónomas de distinto signo político. «Rompe definitivamente o sistema de protección integrador de Galicia», denunció, y advirtió que esta imposición obliga al Gobierno gallego a abandonar el modelo que lleva años impulsando.

Prodeme le encuentra por fin uso a un edificio en el que invirtió tres millones de euros en el 2010

El primer centro específico de Galicia para menores extranjeros estará en un edificio construido hace 15 años por Prodeme, una de las asociaciones más veteranas entre las que trabajan en Galicia por la integración social y laboral de las personas con discapacidades psíquicas.

En Prodeme lo idearon en su momento como una propuesta pionera en Galicia, pero no con el fin que finamente va a tener. El objetivo inicial era transformarlo en la que sería la primera residencia compartida, en la que las personas con discapacidad pudiesen vivir en pisos con sus familias, pero con servicios, como el de cocina y el de lavandería, comunes para todos.

La construcción del edificio empezó en el 2010 y en el 2013 la asociación consiguió licencia administrativa para abrirlo, pero en todos estos años Prodeme no ha sido capaz de conseguir un acuerdo con la Xunta para ayudar a financiar el coste de este servicio. Hubo varias ocasiones en las que pareció estar a punto, pero al final el asunto nunca se llegaba a concretar.

El acuerdo con la Xunta para el centro de menores extranjeros todavía hay que concretarlo, aunque en Prodeme dicen estar convencidos de que esta vez no habrá problema.

Con esta propuesta de la Xunta, la asociación consiguen por fin darle un uso a un edificio en el que invirtieron tres millones de euros del 2010. El edificio se llama Francisco Suárez, como el abogado monfortino que fue el primer presidente de Prodeme. Tres millones es específicamente lo que costó construirlo, porque el terreno les salió gratis. Fue una donación de Francisco Suárez.

El edificio en cuestión es un bloque de cinco plantas que se encuentra en la calle Eduardo Blanco Amor y en la periferia del Malvarón, un barrio que ya en sí mismo está en las afueras del casco urbano de Monforte y en el que hay dos grupos de viviendas sociales.

Las más antiguas fueron construidas durante el franquismo y acabaron por hacer que el barrio fuese conocido también en Monforte como la zona de las casas baratas.