Felipe VI reivindica la labor de la ONU y el multilateralismo en las relaciones internacionales en el Foro La Toja

Manuel Varela Fariña
Manuel Varela A TOXA / LA VOZ

GALICIA

El rey apela a la Unión Europea a «hacerse escuchar» en el nuevo orden internacional durante la inauguración de la séptima edición del encuentro, donde el presidente Alfonso Rueda defendió la diplomacia como solución a los conflictos globales

03 oct 2025 . Actualizado a las 11:28 h.

El rey Felipe VI inauguró la séptima edición del Foro La Toja-Vínculo Atlántico defendiendo un orden mundial sostenido por el multilateralismo como «herramienta indispensable» y reivindicando la labor de las Naciones Unidas frente a la «intensa campaña de descrédito» que, denunció, sufre el organismo internacional. El jefe de Estado hizo entrega del Premio Foro La Toja-Josep Piqué a dos de los siete padres de la Constitución española, Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón y Miquel Roca i Junyent, dos «brillantes juristas» y políticos a quienes valoró su capacidad de alumbrar un texto «que acogiera a todos y no excluyera a nadie».

«Su lección resulta especialmente oportuna en tiempos de incertidumbre», agradeció Felipe VI, que elevó la Carta Magna como «una guía muy valiosa para reflexionar, en tiempos claroscuros, cómo afrontar el desafío de construir un nuevo orden mundial».

A esos «claroscuros» se refirió el rey durante buena parte de su intervención, que tuvo como eje principal un mundo cambiante cuyo orden establecido a partir de la Segunda Guerra Mundial se ha alterado ya, erosionado por «crisis sucesivas» y la «dificultad de sus instituciones» para adaptarse a la velocidad de dichos cambios. Comparó estos tiempos convulsos con la primera mitad del siglo pasado durante la que surgieron «monstruos», y denunció también que el multilateralismo imperante en las relaciones globales hasta ahora se haya visto desplazado por la «multipolaridad» y la nueva distribución de los centros de poder.

Evitó poner nombres a quienes son los líderes mundiales responsables de esa transformación, pero sí citó la «crudeza» en Ucrania y en Gaza, así como en escenarios «menos visibles» como Sudán o el Sahel. «La exigencia de nuestro tiempo no es renunciar al multilateralismo, sino repensarlo, reforzarlo y adaptarlo a un mundo en transformación», reclamó Felipe VI, que reivindicó ese multilateralismo como una «herramienta indispensable» para ordenar la convivencia entre Estados, reduciendo la arbitrariedad y ofreciendo «mecanismos pacíficos» para «resolver diferencias» en las relaciones internacionales.

Aún en el plano geopolítico, el jefe de Estado subrayó la relevancia de la ONU, en el 80 aniversario de su creación y setenta años después del ingreso de España, como una respuesta moral frente a los grandes errores del pasado. «Si bien el éxito no ha sido absoluto, ocho décadas de multilateralismo y cooperación difícilmente pueden considerarse un fracaso», expuso. Frente a la desafección, los ataques externos o la pérdida de cohesión, continuó, dijo creer «firmemente» que la Unión Europea tiene «la responsabilidad de hacerse escuchar» y tener «una voz firme» en la defensa de los valores éticos sobre los que se construyó el ente comunitario. Así, apostó por que Europea asuma «un papel protagonista» en la configuración del nuevo orden internacional.

Ya centrado en los dos homenajeados por el Foro, Felipe VI valoró el «gran consenso» de quienes alumbraron la democracia en España pese a la disparidad política e institucional de sus protagonistas. Un logro, añadió, que todavía «despierta admiración» no solo en Europa, sino «en muchos lugares del mundo».

Recibido por Alfonso Rueda

El rey saludó en gallego, como también hizo en su discurso de apertura el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, al dirigirse al público «na lingua agarimosa de Rosalía e Castelao», recordando que este año se celebra al intelectual galeguista. Pasó después al español para defender la existencia de «vínculos» y «equilibrios» que sostengan el orden internacional: «La diplomacia va a seguir siendo siempre el secreto».

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el ministro de Transportes, Óscar Puente.
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el ministro de Transportes, Óscar Puente. Martina Miser

Se refirió al acuerdo de paz firmado entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, para cesar los ataques en Gaza. «Ojalá sea la solución posible», manifestó el jefe del Gobierno gallego, quien valoró que el hecho de que las partes interesadas en resolver el conflicto se planteen hacerlo abre «una vía a la esperanza». «La otra alternativa es demoladora», zanjó Rueda, quien apeló a al comunidad internacional a «empujar» para solucionar el conflicto. 

Felipe VI bajó del coche oficial pasadas las cuatro y media de la tarde, siendo saludado por Alfonso Rueda, quien ejercía como anfitrión y minutos antes departía con el ministro de Transportes, Óscar Puente, y el presidente del Parlamento gallego, Miguel Santalices. Durante la foto de familia, el monarca saludó a los medios valorando el buen tiempo que le recibió este 2 de octubre en Galicia. «Este año sí», sonrío desde la tarima, en contraste con la lluvia que caía en la isla de A Toxa durante la pasada edición.