El exmarido de la infanta Cristina se plantea volver a casarse un año después de su divorcio oficial y tras tres años de relación con su nueva pareja
19 ene 2025 . Actualizado a las 16:31 h.La publicación de las fotografías de Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia paseando por la playa con actitud cómplice hace tres años provocó un terremoto informativo, dado que el exduque de Palma seguía casado con la infanta Cristina, aunque llevaban años viviendo en diferentes países. «Cosas que pasan», sentenció su hijo Pablo cuando fue abordado por los reporteros. Con el tiempo, la relación entre el exjugador de balonmano y su excompañera de trabajo se ha consolidado tanto que ahora, tres años después, suenan campanas de boda. Así lo adelantó la periodista Marisa Martín Blázquez en el programa Fiesta.
Las pasadas fiestas navideñas fueron el momento elegido para la primera gran reunión familiar de la pareja con los cuatro hijos de Iñaki. Según parece, fue Pablo quien actuó como mediador en este encuentro entre los hermanos Urdangarin y la pareja de su padre. Gracias a la revista Lecturas, pudimos verlos a todos en una excursión por el campo y comiendo en un restaurante de la zona. Al final de la jornada, los hermanos Urdangarin, que se alojaban en casa de su abuela paterna, Claire Françoise Liebaert, regresaron en un coche, mientras Iñaki y Ainhoa lo hacían en otro vehículo.
Ahora, Martín Blázquez ha revelado que aquella reunión tuvo un propósito claro: informar a los hijos de Iñaki sobre los planes de boda con Ainhoa. «Era para pasar unos días y decirles que ya hacía un año que estaba divorciado de su madre, que habían pasado tres años desde la separación y que estaban pensando en casarse», detalló la periodista. «La intención es que sea una boda discreta, con muy poca gente y un grupo reducido», añadió, al tiempo que aseguró que «alguno de los hijos no está del todo a favor» del enlace.
En enero del 2023, justo después de hacerse oficial el divorcio de Cristina de Borbón en diciembre de 2022, Iñaki y Ainhoa se mudaron a un piso alquilado en Ciudad Jardín, en Vitoria, cerca de la madre de Urdangarin, de 90 años. Esta proximidad le permite al exdeportista estar más pendiente de su progenitora.
Desde que comenzaron su historia de amor, la pareja ha tenido que lidiar con la aceptación de sus respectivas familias, ya que ambos tienen hijos de matrimonios anteriores. Incluso la madre del exduque de Palma mantiene una excelente relación con quien fue su nuera durante décadas. Sin embargo, con tiempo y paciencia, Ainhoa ha conseguido hacerse un lugar en la familia Urdangarin.
Con su relación viento en popa, Iñaki y Ainhoa están listos para dar el siguiente paso y darse el «sí, quiero». Por ahora, no se sabe la fecha de la boda, pero todo indica que será una ceremonia íntima y discreta.