Massiel desvela que fue atropellada durante su tratamiento contra el cáncer de pulmón: «Me partió la frente, la nariz, la boca y la rodilla»
GENTE
La cantante anunciaba este viernes su enfermedad y el duro tratamiento que está siguiendo
08 feb 2025 . Actualizado a las 17:44 h.La noticia llegaba a pocas horas de la entrevista en De Viernes, Telecinco. Massiel anunciaba que tiene cáncer de pulmón. Una enfermedad de la que ha estado tratándose en los últimos meses y que coincide con la dolencia que se llevaba a su único hermano, Emilio Santamaría, el pasado mes de junio. «Yo empecé a somatizar todo el sufrimiento de mi hermano y comencé a sentirme muy mal». Para la artista fue un golpe durísimo porque, además de su vínculo familiar, Emilio fue su representante durante muchos años.
La ganadora del Festival de Eurovisión de 1968 ha relatado muy emocionada cómo ha sido el proceso. Massiel sufría importantes dolores hasta que, tras hacerse las pruebas médicas pertinentes, le dieron noticia. «Estoy viva de milagro, ha sido una batalla jodida», dijo al comienzo de la entrevista.
La artista tuvo que ser intervenida en un primer momento a través de la espalda para que le extirparan casi un pulmón entero y, después, se sometió a un duro tratamiento de quimioterapia: «Eso es lo peor, la quimio te deja hecha una mierda y ahí empieza un calvario».
Su operación fue el 5 de abril y en el mes de junio fallecía su hermano, a quien intentó despedir con toda la entereza posible. «Fui con gafas y un sombrero porque traté de sacar fuerzas. No quería que la gente supiera que estaba muy mal. Respiraba muy mal, no estaba para estar de pie».
A la dureza de la situación, la intérprete de «La, la, la» tuvo que añadir otro contratiempo. Massiel sufrió un atropello durante el tratamiento al que se estaba sometiendo. Fue el pasado 22 de noviembre, cuando un coche que daba marcha atrás la arrolló. «Me partió la frente, la nariz, la boca, la rodilla... Era un monstruo, no veía de lo que sangraba». Por este motivo, la cantante fue sometida a una operación de tres horas y, lo peor de todo, es que todo esto no hizo más que ralentizar el proceso de quimioterapia. «Tuve la suerte de no perder la conciencia», añadió.
En cuanto viene la ambulancia y me dicen cómo están las heridas y me dicen: ‘hay que coser’, yo les «dije: ni tocar», explicó. Y es que su primer marido era cirujano plástico y tuvo claro que las suturas se las tenía que hacer un especialista. Ese fue el motivo de tantas hjoras de operación.
Ese accidente le hizo perder, según su testimonio, la parte que ya había recuperado de la quimioterapia. Anoche, la artista, muy afectada, actualizaba su estado. «Sigo con una recuperación muy lenta».