El Martiño Rivas más personal: «Lo que valoro, no en una mujer sino en cualquier persona, es que al lavar ropa no mezcle blanca y de color»
GENTE
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El actor coruñés fue el primer invitado del podcast «Todos somos 144», que realiza entrevistas centradas en la espiritualidad y la aceptación personal. «Me gusta la soledad siempre y cuando sepa que hay una persona a la que puedo recurrir», aseguró ante los conductores del espacio, Paloma Maya y Jorge Sol
11 feb 2025 . Actualizado a las 13:43 h.Martiño Rivas (Vimianzo, A Coruña, 1985) ha sido el primer invitado en el estreno del podcast Todos somos 144. Conducido por Paloma Maya y Jorge Sol, este espacio pretende acercarse al lado más íntimo de sus entrevistados, desvelando sus pretensiones vitales, sus miedos y sus fortalezas. El actor coruñés, conocido por series tan populares como lo fueron El internado o Las chicas del cable, compartió sus inquietudes durante más de una hora. Quien fue pareja de actrices como Irene Escolar (2008-2015) o Kayoko Everhart (2017-2020), esta última madre de su hija Ayo, desveló que tiene «mucho miedo» a la soledad. «Me gusta estar solo, me gusta la independencia... siempre y cuando sepa que hay una persona a la que puedo recurrir», comentó en un espacio que puede oírse en plataformas como Spotify o Apple Podcast.
Emparejado desde 2021 según las revistas del corazón con la modelo Lily Fofana, Rivas mostró madurez existencial a punto de cumplir 40 años. Hace ya 17 años que en 2008 conseguía el Goya a mejor actor revelación por la película de José Luis Cuerda Los girasoles ciegos, punto álgido de una incipiente carrera que tuvo sobresaltos, aunque ahora en lo personal busque tranquilidad: «Que haya cierta paz, cada vez eso lo aprecio más. Antes me gustaba más que me diesen meneos, y meterme en jaleos, y ahora lo que quiero es que no haya sobresaltos».
Su faceta de padre, algo que también le ha otorgado el paso del tiempo, aunque reconfortante, supone también preocupación: «Pienso en mi hija e inmediatamente eso me lleva a un lugar feliz, es un estímulo que me provoca una sonrisa inmediatamente y me hace sentir bien. Y al mismo tiempo va de la mano con ¿cómo estará? ¿qué estará haciendo? ¿qué le pasará? Estás constantemente en un modo de alerta, un rol de protección».
Un «outsider»
Así se autodefinió durante el encuentro ante las cámaras y micrófonos y es que aunque al intérprete siempre le ha «gustado formar parte de un grupo», hacerlo no significa perder la personalidad. «Hay algo de pertenencia a un colectivo que me tira un poco para atrás... Cuando veo a una masa de gente en la cual ya la capacidad de juicio queda suspendida y todos actúan al unísono y se convierten en una piña en la cual no se admite la diversidad de voces, nunca me he sentido cómodo con eso», comentó ante los presentadores durante el episodio.
Al protagonista de la serie Nacho (2023, Atresmedia), se le preguntó también por su forma de enfrentarse a los problemas y vicisitudes del día a día, saliendo a relucir quizás uno de sus defectos en cuanto a fortaleza mental. «Ante un obstáculo tiendo a elaborar muchos escenarios hipotéticos negativos y se convierte en una bomba racimo la cual muchas veces me cuesta parar y pensar, "tío, esto no está más que en tu cabeza, estás anticipando, ya nos preocuparemos del puente cuando lleguemos al río"», fue una de sus reflexiones.
Hubo tiempo, durante los 68 minutos de conversación, para saber qué valora a la hora de buscar pareja: «No estoy hablando de una relación con una mujer, con cualquier persona que conviva, no mezclar la ropa blanca con la de color al lavar ya es algo importante. A partir de ahí ya podemos empezar a entendernos».