«Tenemos ganas de creer y pelear»

M. V. F. VIGO

GRADA DE RÍO

Oscar Vázquez

El celtismo agotó ayer las entradas e invitaciones para el partido frente al Villarreal del día 30

23 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El Celta comunicaba ayer al mediodía que las entradas disponibles para el crucial partido del sábado 30 frente al Villarreal se habían agotado. La siguiente medida era poner a la venta las butacas de la zona visitante toda vez que el conjunto rival no había hecho peticiones para reservar ninguno de esos asientos. Y volvieron las colas a Balaídos. La prueba más evidente de la expectación que ha despertado esta primera final por la permanencia y de cómo la afición se está volcando para tratar de impulsar al equipo.

Varias peñas celtistas confirmaban ayer que el ambiente que se respira a una semana del encuentro y con el parón de por medio es el de querer convertir el municipal vigués en una caldera. «A idea é petar Balaídos. E para iso as peñas intentamos poñer o noso gran de area», dice Miguel Barja, de Merlegos. Su idea es movilizar a sus socios para conseguir un récord de autobuses desplazados desde Santiago de Compostela. «A ver se conseguimos levar dous ou tres», avanza.

Ante el temor de que las entradas se acabaran pronto -como efectivamente sucedió después-, el propio Miguel viajó el jueves a Vigo. «Baixei cuns 30 abonos en busca das invitacións. Estamos intentando mobilizar a todo o mundo», recalca. Otro grupo de peñistas de su agrupación esperó a la mañana de ayer para tratar de conseguir billetes por Internet, ya que era el primer día en que estaban disponibles y apenas duraron unas horas ante la gran demanda.

Buscando invitaciones

Ese gran interés lo han notado también en la peña Irmandiños. Comenta uno de sus responsables, Alberto Fraga, que ha visto a la afición «muy concienciada» de la importancia de este partido. «La gente está buscando invitaciones, carnés, preguntando por iniciativas para antes y durante el partido», revela. Sensaciones parecidas son las que expresa el presidente de Centolos Celestes, Javi Vaz. «Todo el mundo está con ganas porque sabemos que es un partido crucial y que nuestro futuro pasa por él», comenta. Tanto es así, que tampoco se le va de la cabeza que «si se pierde, el desánimo puede ser definitivo», una idea que funciona como gran motor para que todo el mundo ponga de su parte para contribuir a evitarlo. «Sabiendo lo importante que es, vamos a estar todos», advierte.

Entre esos todos estará la peña celtista de Vilagarcía Embruxo Celeste, de las que por la distancia no pueden acudir a todos los partidos, pero que en esta ocasión tienen garantizada su presencia. «Estamos intentando arrastrar non só a todos os peñistas, senón a todos os celtistas que coñecemos da zona. É importantísimo que sexamos cantos máis, mellor e que o estadio se convirta nunha caldeira», apunta su presidente, Guillermo González Villaverde.

Desde A Guarda y demás puntos de la comarca se trasladará como en cada partido la Peña do Baixo Miño, con José Carlos Barros al frente. «Pensamos llenar dos autobuses, aparte de que tenemos muchos peñistas que van por su cuenta. Es la semana decisiva, la más importante desde hace mucho tiempo», recuerda.

El ejemplo del Sevilla

Todos están convencidos de que la afición puede ser fundamental y entienden que el club y los jugadores son de la misma opinión. «La mayoría de los celtistas están asumiendo que es lo que toca si queremos la salvación. Hasta el entrenador y los jugadores están insistiendo en que nos necesitan, así que más claro, agua», dice Fraga. Y lo relaciona con el último triunfo que se ha adjudicado hasta ahora el equipo, frente al Sevilla y también delante de su público. «Aquel día el ambiente fue el punto extra que les faltaba y tiene que volver a serlo. Hay ganas de creer y pelear», sostiene.

Vaz muestra su convencimiento de que la atmósfera en Balaídos va a ser «brutal, tremenda y espectacular» y que eso se va a traducir en que el Celta «va a empezar ganando 1-0». Reivindica también que aquellos que, como él, llevan «toda la vida mamando Balaídos» tienen que «darle duro». «Tenemos FE -muchos hacen estos días el juego de palabras con sus iniciales en la ropa de entrenamiento- en Escribá y, sobre todo, en los jugadores que son de casa, que son los que nos van a sacar de esta», vaticina.

En la misma línea, Fraga pide compromiso del celtismo sin olvidar que «todos» se sienten «decepcionados» con la temporada del equipo. «Llegados a este punto, solo hay dos formas de actuar: cabrearse, gritarles, silbar y demás, o animar, sumar y ayudar a lograrlo», dice. Él cree que solo lo segundo «es de utilidad» y argumenta que «quien quiera al Celta en Primera debe tenerlo claro». «El ambiente debe ser digno de lo que nos jugamos y en eso estamos», agrega.

Recibimiento

Sin poder adelantar detalles del recibimiento, Barja dice que están intentando que sea «o máis parecido posible ao da permanencia do 2013». Asume que «melloralo vai ser difícil» porque solo con recordarlo se le ponen «os pelos de punta».

Barros pide que todos los estamentos pongan de su parte y en ese sentido se suma a una petición surgida en las redes aprovechando la fecha. «Pediría que se pongan lanzaderas desde la Porta do Sol para poder asistir a las dos reconquistas», deja caer confiando en el triunfo.